¡A los tales arrebátelos la muerte! ¡desciendan vivos al abismo! porque hay maldades en sus moradas, y en su corazón.
Hechos 1:18 - Biblia Version Moderna (1929) (Pues este hombre adquirió un campo con el premio de su iniquidad, y cayendo boca abajo, reventó por medio, y derramáronse todas sus entrañas. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Este, pues, con el salario de su iniquidad adquirió un campo, y cayendo de cabeza, se reventó por la mitad, y todas sus entrañas se derramaron. Biblia Nueva Traducción Viviente (Judas había comprado un campo con el dinero que recibió por su traición. Allí cayó de cabeza, se le reventó el cuerpo y se le derramaron los intestinos. Biblia Católica (Latinoamericana) -Sabemos que con el salario de su pecado se compró un campo, se tiró de cabeza, su cuerpo se reventó y se desparramaron sus entrañas. La Biblia Textual 3a Edicion (Éste compró un campo del salario de su iniquidad, y habiéndose hinchado,° reventó por medio y se derramaron todas sus entrañas; Biblia Serafín de Ausejo 1975 pero adquirió un campo con el precio de la traición, cayó de cabeza, reventó y se le salieron todas las entrañas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Este, pues, adquirió un campo con el salario de su iniquidad, y cayendo rostro abajo, se reventó por la mitad, y todas sus entrañas se derramaron. |
¡A los tales arrebátelos la muerte! ¡desciendan vivos al abismo! porque hay maldades en sus moradas, y en su corazón.
Tú empero, oh Dios, harás que ellos desciendan al pozo de perdición: los hombres sanguinarios y engañosos no llegarán a la mitad de sus días; mas yo confiaré en ti.
Entonces Jehová me dijo: ¡Échalo al alfarero! ¡hermoso precio en que yo fui avaluado por ellos! Tomé pues los treinta siclos de plata, y los eché al alfarero en la Casa de Jehová.
porque te honraré con muy grandes honores, y todo lo que me dijeres lo haré. Ahora pues ruégote que vengas y me maldigas a esta gente.
¶Fueron pues los ancianos de Moab y los ancianos de Madián, con las recompensas de la adivinación en su mano; y llegando a donde estaba Balaam, le refirieron las palabras de Balac.
dando a uno cinco talentos, a otro dos, y a otro uno; a cada uno conforme a su capacidad; y luego partió.