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Génesis 40:7 - Biblia Version Moderna (1929)

Preguntó pues a los ministros de Faraón que estaban con él en la prisión de la casa de su señor, diciendo: ¿Por qué causa están hoy tristes vuestros semblantes?

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Biblia Reina Valera 1960

Y él preguntó a aquellos oficiales de Faraón, que estaban con él en la prisión de la casa de su señor, diciendo: ¿Por qué parecen hoy mal vuestros semblantes?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

—¿Por qué se ven tan preocupados hoy? —les preguntó.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Preguntó entonces a esos oficiales de Faraón que estaban con él en la prisión: '¿Por qué amanecieron con tan mala cara?'

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La Biblia Textual 3a Edicion

Preguntó pues a aquellos oficiales de Faraón que estaban con él en la prisión de la casa de su señor, diciendo: ¿Por qué causa están hoy tristes vuestros semblantes?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

y preguntó a los eunucos del Faraón, arrestados con él en la casa de su señor: '¿Por qué tenéis ese semblante preocupado?'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y preguntó a los oficiales de Faraón, que estaban con él en la prisión de la casa de su señor, diciendo: ¿Por qué estáis tan tristes hoy?

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Génesis 40:7
7 Tagairtí Cros  

Y José vino a ellos por la mañana, y los miró, y he aquí que estaban perturbados.


Y los puso a todos juntos en la cárcel tres días.


Éste pues le dijo: ¿Por qué tú, siendo hijo del rey, vas macilento de día en día? ¿no quieres decírmelo? Y Amnón le respondió: Estoy enamorado de Tamar, hermana de mi hermano Absalom.


Me dijo pues el rey: ¿Por qué está triste tu rostro, ya que no estás enfermo? No es ésta otra cosa que pesar de corazón. Entonces temí con gran temor.


Y él les dijo: ¿Qué palabras son estas que os decís el uno al otro, mientras camináis? Y ellos se detuvieron, con rostros entristecidos.


Y él contestó: Habéis tomado mis dioses, que yo me hice, y al sacerdote, y os habéis marchado, y ¿qué más me queda ya? ¿A qué propósito, pues, me decís: qué tienes?


Entonces le decía Elcana su marido: Ana, ¿por qué lloras? ¿y por qué no comes? ¿y por qué se aflige tu corazón? ¿Acaso no te soy yo mejor que diez hijos?