Respondió entonces Isaac su padre, y dijo: He aquí, provista de las grosuras de la tierra será tu habitación, y del rocío del cielo desde arriba;
Génesis 33:9 - Biblia Version Moderna (1929) Mas Esaú dijo: Tengo bastante, hermano mío; sea para ti lo que es tuyo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Esaú: Suficiente tengo yo, hermano mío; sea para ti lo que es tuyo. Biblia Nueva Traducción Viviente —Hermano mío, yo tengo más que suficiente —dijo Esaú—. Guarda para ti lo que tienes. Biblia Católica (Latinoamericana) Le dijo Esaú: 'Hermano, yo tengo de todo, guarda lo que es tuyo. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo Esaú: Yo tengo abundancia, hermano mío, sea para ti lo que es tuyo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo Esaú; 'Tengo ya mucho, hermano mío; sea lo tuyo para ti'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo Esaú: Suficiente tengo yo, hermano mío; sea para ti lo que es tuyo. |
Respondió entonces Isaac su padre, y dijo: He aquí, provista de las grosuras de la tierra será tu habitación, y del rocío del cielo desde arriba;
y por tu espada vivirás, y a tu hermano servirás; mas será que, conforme te vayas libertando, sacudirás su yugo de sobre tu cerviz.
Y Esaú aborreció a Jacob por motivo de la bendición con que le había bendecido su padre; y decía Esaú en su corazón: Se acercan ya los días del duelo por mi padre; entonces mataré a Jacob mi hermano.
Pero Jacob le dijo: No sea así, te lo ruego, si he hallado gracia en tus ojos; sino que has de recibir un presente de mi mano, por lo mismo que he visto tu rostro, como quien ve el rostro de Dios, y tú te complaciste en mí.
Entonces Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé; ¿soy yo acaso guarda de mi hermano?
Cuando los caminos de un hombre son del agrado de Jehová, éste hace que hasta sus enemigos estén en paz con él.
La sanguijuela tiene dos hijas, que claman: ¡Dame! dame! Tres cosas hay que nunca se hartan, y cuatro que jamás dicen: ¡Basta!
Hombre hay que es solo, sin otro que le acompañe: ni siquiera hijo ni hermano tiene; y con todo, no hay fin de todo su afán, ni sus ojos se sacian de las riquezas. ¿Para qué pues, debería decir, me afano, y a mí mismo me privo del bien? ¡Esto también es vanidad y trabajo ímprobo!
Y ellos, oyéndolo, glorificaron a Dios; y le dijeron: Estás viendo, hermano, cuantos millares hay entre los judíos de los que han creído; y todos ellos son celosos de la ley;
Partió pues Ananías, y entró en la casa; y poniendo las manos sobre él, dijo: Saulo, hermano, el Señor, es decir, Jesús, que te apareció en el camino por donde viniste, me ha enviado a ti, para que recibas la vista, y seas lleno del Espíritu Santo.
ya no como siervo, sino más que siervo, como hermano amado, especialmente a mí, pero cuánto mas a ti, siendo tuyo no sólo en la carne, sino en el Señor.
Porque tengo mucho gozo y consuelo a causa de tu amor, hermano, por cuanto los corazones de los santos han sido recreados por ti.
Porque habían subido los hijos de Israel, y llorado delante de Jehová hasta la tarde; y consultaron a Jehová, diciendo: ¿Debo volver a acercarme en batalla contra los hijos de Benjamín mi hermano? Y respondió Jehová: Subid contra él.