Porque allí se reunían todos los rebaños; y revolvían los pastores la piedra de sobre la boca del pozo, y abrevaban el ganado; y volvían a poner las piedra sobre la boca del pozo, en su lugar.
Génesis 29:8 - Biblia Version Moderna (1929) Mas ellos respondieron: No podemos, hasta tanto que se junten todos los rebaños; entonces revuelven los pastores la piedra de sobre la boca del pozo, y abrevamos el ganado. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y ellos respondieron: No podemos, hasta que se junten todos los rebaños, y remuevan la piedra de la boca del pozo, para que abrevemos las ovejas. Biblia Nueva Traducción Viviente —No podemos dar de beber a los animales hasta que hayan llegado todos los rebaños —contestaron—. Entonces los pastores quitan la piedra de la boca del pozo y damos de beber a todas las ovejas y las cabras. Biblia Católica (Latinoamericana) Los pastores respondieron: 'No podemos hacer eso hasta que no se junten todos los rebaños y se haya sacado la piedra de la boca del pozo. Entonces damos de beber a las ovejas. La Biblia Textual 3a Edicion Pero ellos dijeron: No podemos hasta que se reúnan todos los rebaños. Entonces rodamos la piedra de sobre la boca del pozo y abrevamos las ovejas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ellos respondieron: 'No podemos hacerlo hasta que se junten todos los rebaños y corramos la piedra que hay sobre la boca del pozo; entonces abrevaremos el ganado'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ellos respondieron: No podemos, hasta que se junten todos los ganados, y remuevan la piedra de sobre la boca del pozo, para que abrevemos las ovejas. |
Porque allí se reunían todos los rebaños; y revolvían los pastores la piedra de sobre la boca del pozo, y abrevaban el ganado; y volvían a poner las piedra sobre la boca del pozo, en su lugar.
Entonces él dijo: He aquí, aun resta mucho del día, no es hora de recoger el ganado; abrevad las ovejas, e idlas a apacentar.
Todavía estaba él hablando con ellos, cuando Raquel llegó con el ganado de su padre; pues era ella la pastora.
Les dijeron pues: No podemos hacer esto, el dar nuestra hermana a un hombre incircunciso; porque sería una deshonra para nosotros.
Y sirviéronla, para él aparte, y para ellos aparte, y para los Egipcios que comían con él aparte; pues los Egipcios no pueden comer con los Hebreos; porque cosa abominable es esta para los Egipcios.
Y estaban diciendo entre sí: ¿Quién nos removerá la piedra de la puerta del sepulcro?
Iban ellos subiendo la cuesta hacia la ciudad, cuando se encontraron con unas muchachas que salían a sacar agua, y les dijeron: ¿Está aquí el vidente?