¶En aquellos días, poniéndose Pedro en pie en medio de los hermanos (y el número de las personas reunidas allí en un mismo lugar, era como de ciento veinte), les dijo:
Gálatas 6:18 - Biblia Version Moderna (1929) ¶Hermanos, la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu. Amén. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Hermanos, la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu. Amén. Biblia Nueva Traducción Viviente Amados hermanos, que la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con el espíritu de cada uno de ustedes. Amén. Biblia Católica (Latinoamericana) Hermanos, que la gracia de Cristo Jesús, nuestro Señor, esté con su espíritu. Amén. La Biblia Textual 3a Edicion Hermanos, la gracia de nuestro Señor Jesús, el Mesías, sea con vuestro espíritu. Amén. Biblia Serafín de Ausejo 1975 La gracia de nuestro Señor Jesucristo esté con vuestro espíritu, hermanos. Amén. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Hermanos, la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu. Amén. |
¶En aquellos días, poniéndose Pedro en pie en medio de los hermanos (y el número de las personas reunidas allí en un mismo lugar, era como de ciento veinte), les dijo:
Y no quiero que ignoréis, hermanos, que muchas veces me he propuesto ir a vosotros (y hasta ahora he sido estorbado) para que tenga algún fruto entre vosotros también, así como entre los demás gentiles.
Y el Dios de paz quebrantará en breve a Satanás bajo vuestros pies.¶La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.
Os saluda Gayo mi huesped, que lo es también de toda la iglesia. Os saluda Erasto, tesorero de la ciudad, y el hermano Cuarto.
¶La gracia del Señor Jesucristo, y el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén.
¶Hermanos, hablo conforme al uso humano: Aunque no fuese más que pacto de un hombre, sin embargo una vez confirmado, ninguno de los contratantes puede anularlo, ni hacerle adición.
¶Os ruego, hermanos, que seáis como yo; pues yo soy como vosotros. No me habéis hecho agravio alguno.
Y nosotros, hermanos, cual era Isaac, somos hijos de la promesa divina.
HERMANOS, si alguno fuere sobrecogido en cualquiera transgresión, vosotros que sois espirituales, restaurad al tal en espíritu de mansedumbre, mirándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.
La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu. Amén.