Y su fama se extendió por toda la Siria; y traíanle todos los que estaban enfermos, atacados por diversas enfermedades y tormentos, y los endemoniados, y los lunáticos, y los paralíticos; y él los sanaba.
Gálatas 1:21 - Biblia Version Moderna (1929) Después fuí a las regiones de Siria y Cilicia: Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Después fui a las regiones de Siria y de Cilicia, Biblia Nueva Traducción Viviente Después de esa visita, me dirigí al norte, a las provincias de Siria y Cilicia. Biblia Católica (Latinoamericana) Luego me fui a las regiones de Siria y Cilicia, La Biblia Textual 3a Edicion Después fui a las regiones de Siria y de Cilicia. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Después fui a las regiones de Siria y de Cilicia; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Después fui a las regiones de Siria y de Cilicia, |
Y su fama se extendió por toda la Siria; y traíanle todos los que estaban enfermos, atacados por diversas enfermedades y tormentos, y los endemoniados, y los lunáticos, y los paralíticos; y él los sanaba.
HABÍA en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros, como Bernabé y Simeón, que se llamaba Niger, y Lucio de Cirene, y Manahén (hermano de leche de Herodes tetrarca), y Saulo.
escribiendo y enviando por mano de ellos, a este efecto: Los apóstoles y los ancianos y los hermanos, a los hermanos de entre los gentiles, que están en Antioquía y Siria y Cilicia; salud:
¶Y Pablo, habiéndose detenido todavía muchos días, despidióse de los hermanos, y se dió a la vela, para irse a la Siria (y con él Priscila y Aquila), habiéndose traído la cabeza en Cencrea, porque tenía hecho un voto.
Y habiendo avistado a Chipre, dejándola a la izquierda, navegamos a la Siria, y aportamos a Tiro; porque allí la nave había de descargar su flete.
Mas Pablo dijo: Soy en verdad un judío, de Tarso en Cilicia, ciudadano de no obscura ciudad, y ruégote me permitas hablar al pueblo.
Yo soy judío, nacido en Tarso, en Cilicia, pero educado en esta ciudad, a los pies de Gamaliel, instruído por él conforme a lo más riguroso de la ley de nuestros padres, siendo celoso por Dios, así como vosotros lo sois el día de hoy.
Y habiendo éste leído la carta, le preguntó de qué provincia era; y cuando supo que era de Cilicia,
Levantáronse entonces unos hombres de la sinagoga llamada de los Libertos, y de los Cireneos, y los Alejandrinos, y los de Cilicia y la provincia de Asia, disputando con Esteban.
Pero los hermanos, al conocer esto, le condujeron a Cesarea, y de allí le enviaron a Tarso.