¡Sean raídos del libro de los vivientes, y no sean escritos entre los justos!
Éxodo 32:33 - Biblia Version Moderna (1929) Pero Jehová respondió a Moisés: Al que haya pecado contra mí, a éste borraré de mi libro. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y Jehová respondió a Moisés: Al que pecare contra mí, a este raeré yo de mi libro. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero el Señor respondió a Moisés: —No, yo borraré el nombre de todo aquel que haya pecado contra mí. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé respondió a Moisés: 'Al que peca contra mí, a éste borraré yo de mi libro. La Biblia Textual 3a Edicion Pero YHVH dijo a Moisés: Al que haya pecado contra mí, a éste borraré de mi libro. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh respondió a Moisés: 'Al que haya pecado contra mí, a ése borraré de mi libro. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová respondió a Moisés: Al que pecare contra mí, a este raeré yo de mi libro. |
¡Sean raídos del libro de los vivientes, y no sean escritos entre los justos!
Mas yo estoy afligido y dolorido; ¡oh Dios, póngame en alto tu salvación!
Has reprendido naciones, has destruído al inicuo; has borrado el nombre de ellos para siempre jamás.
Entonces dijo Jehová a Moisés: Escribe esto para memoria en un libro, y ponlo en conocimiento de Josué: Yo raeré del todo la memoria de Amalec de debajo del cielo.
El alma que pecare, ésa es la que morirá: el hijo no llevará la iniquidad del padre, ni el padre llevará la iniquidad del hijo; la justicia del justo estará sobre él, y la maldad del malo sobre él estará.
He aquí que todas las almas son mías: coma el alma del padre, así también el alma del hijo; mías son todas; y el alma que pecare, ésa es la que morirá.
Y toda persona que hiciere cualquiera clase de obra en este día especial, yo cortaré a la tal persona de entre su pueblo.
No querrá Jehová perdonarle; sino que entonces humearán la ira de Jehová y sus celos contra el tal hombre, y vendrán a asentarse sobre él todas las maldiciones escritas en este libro; y Jehová raerá su nombre de debajo del cielo;
Y te ruego a ti también, fiel compañero de yugo, que ayudes en ello a estas mujeres, las cuales trabajaron conmigo en el evangelio, con Clemente también, y los demás de mis colaboradores, cuyos nombres están en el libro de la vida.
Y todos los que habitan sobre la tierra la adorarán, es decir, aquellos cuyos nombres no están escritos en el libro de la vida del Cordero que fué inmolado desde la fundación del mundo.
Y ví a los muertos, pequeños y grandes, estar en pie delante del trono; y abriéronse los libros; abrióse también otro libro, que es el libro de la vida: y los muertos fueron juzgados de acuerdo con las cosas escritas en los libros, según sus obras.
El que venciere será así revestido de ropas blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, sino confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus santos ángeles.