Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Éxodo 22:24 - Biblia Version Moderna (1929)

y encenderáse mi ira, y os mataré a espada; y vuestras mujeres serán viudas, y huérfanos vuestros hijos.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

y mi furor se encenderá, y os mataré a espada, y vuestras mujeres serán viudas, y huérfanos vuestros hijos.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Mi enojo se encenderá contra ti y te mataré a filo de espada. Entonces tus esposas serán las viudas y tus hijos los huérfanos.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Si prestas dinero a uno de mi pueblo, al pobre, que tú conoces, no serás como el usurero, no le exigirás interés.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

y se encenderá mi ira, y os haré morir a espada, y vuestras mujeres quedarán viudas y vuestros hijos huérfanos.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Si prestas dinero a uno de mi pueblo, al indigente que está contigo, no te comportarás con él como usurero: no le cobrarás intereses.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

y se encenderá mi ira y os mataré a espada, y vuestras esposas quedarán viudas y huérfanos vuestros hijos.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Éxodo 22:24
21 Tagairtí Cros  

Y cuando hube consultado conmigo mismo, me puse en contienda con los nobles y con los magistrados; y les decía: ¿Conque vosotros cobráis usura cada uno de su hermano? Y junté contra ellos una gran asamblea.


Porque me temía del castigo de Dios, y a causa de su majestad no podía yo hacer ningún mal.


porque una boca maligna y una boca engañosa han abierto mis enemigos contra mí: contra mí han hablado con lengua mentirosa.


¡Sean sus hijos huérfanos, y su mujer viuda!


el que no da su dinero a logro injusto, ni toma cohecho contra el inocente: el que hace estas cosas no será jamás movido.


¡Derrama sobre ellos tu indignación, y el ardor de tu ira los sobrecoja!


¡Tú eres terrible, tú solo! y ¿quién podrá estar en pie delante de ti una vez que se encienda tu ira?


¿Quién conoce el poder de tu ira, y, según tu temor, tu indignación?


Sus viudas se me aumentan más que la arena de los mares; les traigo el asolador al mediodía, contra la madre del escogido guerrero: hago caer sobre ella de repente angustia y terrores.


¡Por tanto abandona sus hijos al hambre, y a ellos mismos entrégalos al poder de la espada; y sus mujeres también queden sin hijos, y viudas; y mueran sus maridos de peste, y caigan a cuchillo sus mancebos en batalla!


Hemos venido a ser huérfanos; somos sin padre, y nuestras madres son como viudas.


¶Y cuando empobreciere tu hermano y decayere a tu lado, tú le apoyarás, (aunque fuere extranjero o transeunte), para que pueda restablecerse junto a ti.


No tomarás de él usura ni ganancia (teniendo temor a tu Dios), para que pueda restablecerse tu hermano junto a ti.


Delante de su indignación ¿quién podrá estar en pie? ¿o quién aguantará el ardor de su ira? ¡derrámase como fuego su encono, y los peñascos se despedazan con él!


Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando, darán en vuestro regazo; porque con la misma medida que midiereis, se os volverá a medir.


De uno de tierra extraña podrás exigirla, mas no la exigirás de tu hermano; para que te bendiga Jehová tu Dios en toda empresa de tu mano, en la tierra adonde vas para tomar posesión de ella.


¶Cuando hicieres algún voto a Jehová tu Dios, no dilates en pagarlo; porque sin falta te lo reclamará Jehová tu Dios, y sería pecado en ti.


Es cosa espantosa caer en manos del Dios vivo.