Por la soberbia no viene más que contienda; pero con los avisados está la sabiduría,
Eclesiastés 7:8 - Biblia Version Moderna (1929) Más vale el fin de una cosa que su principio; y el paciente de espíritu es mejor que el orgulloso de espíritu. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Mejor es el fin del negocio que su principio; mejor es el sufrido de espíritu que el altivo de espíritu. Biblia Nueva Traducción Viviente Vale más terminar algo que empezarlo. Vale más la paciencia que el orgullo. Biblia Católica (Latinoamericana) Terminar una obra vale más que comenzarla: lo que cuenta es la perseverancia, y no la pretensión. La Biblia Textual 3a Edicion Mejor es el fin de un asunto que su comienzo, Y el paciente de espíritu mejor que el altivo de espíritu. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Más vale el fin de una cosa que su comienzo; más vale la paciencia que el orgullo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mejor es el fin del asunto que su principio; mejor es el sufrido de espíritu que el altivo de espíritu. |
Por la soberbia no viene más que contienda; pero con los avisados está la sabiduría,
El que es tardo en airarse es de grande entendimiento; mas el que es impaciente de espíritu ensalza la necedad.
El hombre iracundo suscita reyertas; mas aquel que es tardo en airarse apacigua las contiendas.
Mejor es el sufrido que el valiente, y el que rige su espíritu, que aquel que toma una ciudad.
El orgulloso de espíritu excita las contiendas; mas el que confía en Jehová, prosperara.
EL buen nombre es mejor que el ungüento precioso; y el día de la muerte del justo que el día de su nacimiento.
Mas Abraham dijo : Hijo, acuérdate que en tu vida recibiste los bienes tuyos, y Lázaro de igual manera los males suyos: ahora empero él aquí es consolado, y tú, angustiado.
¶Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, longanimidad, benignidad, bondad, fidelidad,
con toda humildad y mansedumbre, con paciencia, soportándoos los unos a los otros en amor fraternal;
Porque tenéis necesidad de la paciencia, a fin de que, habiendo hecho la voluntad de Dios, recibáis la promesa.
He aquí, llamamos bienaventurados a los que han soportado la aflicción. Habéis oído hablar de la paciencia de Job, y habéis visto el fin que vino del Señor; porque el Señor es muy misericordioso y compasivo.
Tened paciencia vosotros también; afirmad vuestros corazones, porque el advenimiento del Señor se acerca.
¶Por lo cual, ceñid los lomos de vuestro ánimo, sed sobrios, y tened vuestra esperanza puesta completamente en la gracia que os ha de ser traída al tiempo de la manifestación de Jesucristo;