Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Apocalipsis 21:9 - Biblia Version Moderna (1929)

¶Y vino uno de los siete ángeles que tenían los siete tazones llenos de las siete postreras plagas; y habló conmigo, diciendo: Ven acá; te mostraré la novia, la esposa del Cordero.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Vino entonces a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas con las últimas siete plagas se me acercó y me dijo: «¡Ven conmigo! Te mostraré a la novia, la esposa del Cordero».

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Se acercó a mí uno de los siete ángeles de las siete copas llenas de las siete últimas plagas y me dijo: 'Ven, que te voy a mostrar a la novia, a la esposa del Cordero.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Y vino uno de los siete ángeles que tienen las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven, te mostraré la novia, la esposa del Cordero.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas finales y me dijo: 'Ven; te mostraré a la desposada, la esposa del Cordero'.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y vino a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la desposada, la esposa del Cordero.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Apocalipsis 21:9
10 Tagairtí Cros  

REVELACIÓN de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y él envió y la significó, por medio de su ángel, a su siervo Juan;


Y VINO uno de los siete ángeles que tenían los siete tazones, y habló conmigo, diciendo: Ven acá; te mostraré el juicio de la gran ramera, que está sentada sobre muchas aguas;


¡Regocijémonos, y cantemos con júbilo, y démosle gloria! porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.


Y midió el muro de ella, ciento cuarenta y cuatro codos, medida del hombre, es decir, del ángel.


Y ví la santa ciudad, la nueva Jerusalem, descendiendo del cielo, desde Dios, preparada como una novia engalanada para su esposo.


Y ME mostró un río de agua de vida, resplandeciente como el cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero, en medio de la plaza de la ciudad.


¶Y el Espíritu y la esposa dicen ¡Ven! y el que oye, diga: ¡Ven! y el que tiene sed, ¡venga! ¡y el que quiera, tome del agua de la vida, de balde!


¶Y díjome: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que pronto han de suceder.