Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




2 Samuel 10:11 - Biblia Version Moderna (1929)

Y dijo Joab: Si pudieren los Siros más que yo, tú me ayudarás; y si los hijos de Ammón pudieren más que tú, yo acudiré y te ayudaré a ti.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Y dijo: Si los sirios pudieren más que yo, tú me ayudarás; y si los hijos de Amón pudieren más que tú, yo te daré ayuda.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

«Si los arameos son demasiado fuertes para mí, entonces ven en mi ayuda —le dijo Joab a su hermano—. Si los amonitas son demasiado fuertes para ti, yo iré en tu ayuda.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Dijo entonces: 'Si los arameos son más poderosos que yo, tú vendrás a ayudarme, y si los amonitas son más poderosos que tú, yo iré a ayudarte.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

dijo: Si los sirios son demasiado fuertes para mí, tú me ayudarás, y si los amonitas son más fuertes que tú, entonces yo te ayudaré.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Joab le advirtió: 'Si los arameos me dominan, vienes en mi auxilio, y si los amonitas te dominan a ti, acudiré yo en tu ayuda.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y dijo: Si los sirios me fueren superiores, tú me ayudarás; y si los hijos de Amón pudieren más que tú, yo te daré ayuda.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



2 Samuel 10:11
8 Tagairtí Cros  

y entregó el resto del pueblo en mano de Abisai su hermano, el cual los puso en orden contra los hijos de Ammón.


¡Ten fortaleza, y esforcémonos por nuestro pueblo y por las ciudades de nuestro Dios; y haga Jehová lo que bien le pareciere!


dondequiera pues que oyereis el sonido de la trompeta, allí reuníos con nosotros; nuestro Dios peleará por nosotros.


Mas yo he rogado por ti, para que tu fe no falte; y tú, vuelto á mí, fortalece a tus hermanos.


NOSOTROS pues que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los que son débiles, y no complacemos a nosotros mismos.


Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo.