A cada toque del clarín grita: '¡Ah!'; olfatea de lejos la batalla, los gritos de los jefes y el estrépito.
Zacarías 10:3 - Biblia Martin Nieto Mi ira se ha encendido contra los pastores, castigaré a los machos cabríos. Sí, el Señor todopoderoso visitará su rebaño -la casa de Judá- y le hará como un caballo brioso en la batalla. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Contra los pastores se ha encendido mi enojo, y castigaré a los jefes; pero Jehová de los ejércitos visitará su rebaño, la casa de Judá, y los pondrá como su caballo de honor en la guerra. Biblia Nueva Traducción Viviente «Mi ira se enciende contra sus pastores y castigaré a esos líderes. Pues el Señor de los Ejércitos Celestiales ha llegado para cuidar a Judá, su rebaño. Él los hará fuertes y magníficos, como un caballo majestuoso en la batalla. Biblia Católica (Latinoamericana) (Me he indignado con los pastores y voy a castigar a los chivatos.)
Pero Yavé de los Ejércitos visitará a su rebaño, la tribu de Judá, ellos serán su caballo de batalla. La Biblia Textual 3a Edicion Mi ira se ha encendido contra los pastores, Tomaré cuentas a los machos cabríos,° YHVH Sebaot visitará° a su rebaño, la casa de Judá, Y hará de ella su corcel real en el combate. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Contra los pastores se enciende mi ira, voy a castigar a los machos cabríos. Yahveh Sebaot visita a su grey, la casa de Judá, la hace su corcel capitán en la batalla. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Contra los pastores se encendió mi ira, y castigué a los machos cabríos; porque Jehová de los ejércitos ha visitado su rebaño, la casa de Judá, y los ha hecho como su caballo de honor en la batalla. |
A cada toque del clarín grita: '¡Ah!'; olfatea de lejos la batalla, los gritos de los jefes y el estrépito.
El pueblo creyó, y comprendiendo que el Señor había visitado a los israelitas y había visto su opresión, se postraron y adoraron.
Se apareja el caballo para el día del combate, pero del Señor depende la victoria.
Cuando el Señor haya concluido toda su obra en el monte Sión y en Jerusalén, castigará la altivez del corazón del rey de Asiria y la arrogancia de sus ojos altaneros.
Aquel día el Señor visitará a las milicias del cielo allá en lo alto; y aquí abajo, a los reyes de la tierra.
Necios han sido los pastores; no han buscado al Señor. Por eso no han prosperado y todo su rebaño ha quedado disperso.
'Yo los castigaré; sus jóvenes caerán a espada, sus hijos y sus hijas morirán de hambre,
Al cabo de estos setenta años yo castigaré al rey de Babilonia y a aquella nación -dice el Señor- por sus crímenes, así como al país de los caldeos, y haré de él una desolación eterna.
¡Gritad, pastores; gritad, revolcaos en la tierra, mayorales del rebaño, porque ha llegado el día de vuestra matanza; caeréis como carneros escogidos!
Rebaño perdido era mi pueblo; sus pastores lo extraviaban, le hacían vagar por las montañas; de monte en colina caminaba, olvidando su aprisco.
Pues esto dice el Señor Dios: Yo mismo cuidaré de mi ganado y le pasaré revista.
Como un pastor pasa revista a su ganado cuando se encuentra entre su rebaño disperso, así pasaré yo revista a mis ovejas y las recobraré de todos los lugares donde se habían dispersado en día de nubes y tinieblas.
'Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel y diles: Pastores, esto dice el Señor Dios: ¡Ay de los pastores de Israel que se apacientan a sí mismos! ¿No es el rebaño al que deben apacentar los pastores?
Corromperá con halagos a los violadores del pacto, pero aquellos que conocen a su Dios se mantendrán firmes y actuarán.
En el día del sacrificio del Señor intervendré contra los ministros, contra los príncipes y contra todos los que se visten a la moda extranjera;
Y el litoral será para el resto de la casa de Judá: allí apacentarán el ganado, y por la tarde reposarán en la casa de Ascalón, porque el Señor, su Dios, les visitará y los hará volver de su destierro.
¡Ay del pastor infiel que abandona las ovejas! ¡Que la espada venga sobre su brazo y sobre su ojo derecho! ¡Que su brazo se seque y que su ojo derecho quede completamente ciego!
'Bendito sea el Señor, / Dios de Israel, / porque ha intervenido para liberar a su pueblo; /
Comportaos ejemplarmente en medio de los paganos, para que lo mismo que os calumnian como malhechores, al ver vuestras buenas obras glorifiquen a Dios el día que venga a visitarlos.
Noemí salió de Moab con sus dos nueras para volver a su patria, pues había oído que el Señor se preocupaba de su pueblo, dándole pan.