ten piedad de mí, Señor, pues te estoy llamando a todas horas;
Ten misericordia de mí, oh Jehová; Porque a ti clamo todo el día.
Ten misericordia de mí, oh Señor, porque a ti clamo constantemente.
Tú eres mi Dios; piedad de mí, Señor, que a ti clamo todo el día.
Oh Adonay, ten misericordia de mí, Porque a ti clamo todo el día.
Ten piedad, oh Señor, que te estoy invocando todo el día;
Ten misericordia de mí, oh Jehová: Porque a ti clamo todo el día.
guíame en tu verdad, enséñame; tú eres mi Dios y mi salvador, yo siempre espero en ti.
Al maestro de coro. Para instrumentos de cuerda. Salmo de David
Yo he dicho: 'Señor, ten piedad de mí, cúrame, pues te he ofendido'.
Yo invocaré a Dios, el Señor me salvará.
Al maestro de coro. Según 'Paloma que viene de lejos'. Poema de David. Cuando los filisteos le apresaron en Gat
Al maestro de coro. Según 'No destruyas'. Poema de David, cuando huyendo de Saúl se escondió en la cueva
tengo los ojos consumidos de aflicción. Te estoy llamando, Señor, constantemente, con las manos alzadas hacia ti.
Señor, Dios, salvador mío, día y noche te estoy llamando a gritos;
has alejado de mí a mis compañeros, has hecho que al verme se horroricen de mí: me encuentro encerrado y sin salida,
¿Y no hará Dios justicia a sus elegidos, que claman a él día y noche? ¿Les va a hacer esperar?
Tenía ochenta y cuatro años. Estaba siempre en el templo, sirviendo a Dios noche y día con ayunos y oraciones.
orando sin cesar bajo la guía del Espíritu con toda clase de oraciones y súplicas; estad alerta y pedid constantemente por todos los creyentes;