Salmos 47:3 - Biblia Martin Nieto porque el Señor, el altísimo, es terrible, un gran rey sobre toda la tierra. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Él someterá a los pueblos debajo de nosotros, Y a las naciones debajo de nuestros pies. Biblia Nueva Traducción Viviente Él subyuga a las naciones frente a nosotros; pone a nuestros enemigos bajo nuestros pies. Biblia Católica (Latinoamericana) Bajo nuestro yugo pone a las naciones
y los pueblos a nuestros pies;' La Biblia Textual 3a Edicion Él someterá los pueblos a nosotros, Las naciones bajo nuestros pies, Biblia Serafín de Ausejo 1975 El Señor, el Altísimo, es temible, rey soberano sobre la tierra entera. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Él sujetará a los pueblos debajo de nosotros, y a las naciones debajo de nuestros pies. |
¡Viva el Señor, bendita sea mi roca! ¡Alabado sea Dios, el Dios de mi victoria!
Venid y ved las proezas de Dios, las maravillas que ha hecho por los hombres.
Porque el Señor es el Dios grande, el rey grande sobre todos los dioses.
¿Quién no te temerá, rey de las naciones? Sí, a ti se te debe el temor, porque entre todos los sabios de las naciones, en todos sus reinos, no hay nadie como tú.
Y el Señor reinará sobre toda la tierra. En aquel día el Señor será único, y único será su nombre.
¡Maldito el tramposo que, teniendo en su rebaño un macho perfecto, hace una promesa y ofrece al Señor en sacrificio otro defectuoso! Yo soy un gran rey -dice el Señor todopoderoso-, y mi nombre es temible entre las naciones.
Pues es necesario que él reine hasta poner a todos sus enemigos bajo sus pies.
¡Dichoso tú, Israel! / ¿Quién como tú, pueblo vencedor? / Dios es el escudo que te protege, / la espada en marcha / que te conduce al triunfo. / Te adularán tus enemigos / para corromperte, / pero tú aplastarás su orgullo'.
el cual transformará nuestro cuerpo lleno de miserias conforme a su cuerpo glorioso en virtud del poder que tiene para someter a sí todas las cosas.
El Señor les dio paz con todos los pueblos vecinos, como había jurado a sus padres; ninguno de sus enemigos pudo resistirlos; a todos los entregó el Señor en sus manos.