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Salmos 44:3 - Biblia Martin Nieto

Expulsaste naciones y los plantaste a ellos, exterminaste pueblos para hacerlos crecer.

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Biblia Reina Valera 1960

Porque no se apoderaron de la tierra por su espada, Ni su brazo los libró; Sino tu diestra, y tu brazo, y la luz de tu rostro, Porque te complaciste en ellos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

No fue con sus espadas que conquistaron la tierra, ni sus brazos fuertes les dieron la victoria. Fueron tu mano derecha y tu brazo fuerte y la luz cegadora de tu rostro que los ayudaron, porque los amabas.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

No conquistó al país su propia espada, ni su brazo los hizo vencedores, sino que fueron tu diestra y tu brazo y la luz de tu rostro, porque los amabas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Aunque no por su espada heredaron la tierra, ni su brazo les dio la victoria, Sino tu diestra, tu brazo, y la luz de tu rostro, Porque te complacías en ellos.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Tú mismo, con tu mano, desposeíste pueblos, a fin de establecerlos, maltrataste naciones para hacerles espacio.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque no se apoderaron de la tierra por su espada, ni su brazo los libró; sino tu diestra, y tu brazo, y la luz de tu rostro, porque te complaciste en ellos.

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Salmos 44:3
27 Tagairtí Cros  

¿Hay sobre la tierra un pueblo como tu pueblo Israel, al cual Dios mismo vino a rescatarlo para hacerlo su pueblo, para hacerlo famoso, para hacer en su favor terribles y grandes prodigios y expulsar a las naciones y a sus dioses delante de tu pueblo, al que rescataste de Egipto?


Tú, Señor, Dios nuestro, echaste a los habitantes de esta tierra para dársela a los hijos de Abrahán, tu amigo.


Manifiesta a su pueblo el poder de sus obras, dándole la heredad de las naciones.


Despliega tu bondad, tú que salvas de sus opresores a los que buscan refugio en tu derecha;


Entonces celebraremos tu victoria y en nombre de Dios tremolaremos las banderas. Que el Señor te conceda todo lo que pidas.


Ofreced sacrificios de justicia y tened confianza en el Señor.


Mis huesos se quebrantan, mis opresores me insultan, y me repiten a lo largo del día: '¿Dónde está tu Dios?'.


Quiero recordar aquello y desahogar mi alma; cuando entraba en la casa de Dios como en cortejo noble, al son de gritos de alegría y dando gracias entre la multitud en fiesta.


¿Por qué retiras tu mano poderosa y te quedas cruzado de brazos?


Tú eres el Dios que hace milagros, y has mostrado a los pueblos tu poder;


echó a las naciones delante de ellos, les repartió la tierra a suertes, estableció en sus tiendas a las tribus de Israel.


la viña que tu diestra plantó, el retoño que tú mismo hiciste fuerte.


Arrancaste una viña de Egipto, y para trasplantarla echaste a las naciones;


Temblor y espanto les asaltan; por la fuerza de tu brazo enmudecen como piedra. Hasta que tu pueblo, oh Señor, haya pasado; hasta que haya pasado este pueblo que adquiriste.


¿el que al lado de Moisés hizo marchar su brazo glorioso, y dividió las aguas ante ellos logrando así un eterno renombre?;


Entonces me dijo: Ésta es la palabra del Señor sobre Zorobabel: 'No por el poder de las armas ni por la violencia, sino por mi espíritu, palabra del Señor todopoderoso.


Si el Señor nos favorece, nos hará entrar en ella y nos la dará. Es una tierra que mana leche y miel.


Pero llevamos este tesoro en vasijas de barro, para que aparezca claro que esta pujanza extraordinaria viene de Dios y no de nosotros.


Sin embargo, sólo se unió con tus padres, y esto por amor; y después de ellos eligió a sus descendientes, vosotros mismos, entre todas las naciones, hasta el día de hoy.


Mandé delante de vosotros avispas, que pusieron en fuga a los dos reyes amorreos. Esto no lo debes a tu espada ni a tu arco.


Y añadió: 'En esto conoceréis que en medio de vosotros está un Dios viviente que echará delante de vosotros al cananeo, al hitita, al heveo, al fereceo, al guirgaseo, al amorreo y al jebuseo:


El Señor no rechazará a su pueblo por la gloria de su gran nombre, porque el Señor se ha dignado hacer de vosotros su pueblo.