Perece el león por falta de presa, y los cachorros de la leona son desperdigados.
Salmos 34:11 - Biblia Martin Nieto los ricos caen en la miseria y pasan hambre, pero a los que buscan al Señor nada les falta. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Venid, hijos, oídme; El temor de Jehová os enseñaré. Biblia Nueva Traducción Viviente Vengan, hijos míos, y escúchenme, y les enseñaré a temer al Señor. Biblia Católica (Latinoamericana) Vengan, hijos, y pónganme atención,
quiero enseñarles el temor del Señor. La Biblia Textual 3a Edicion l Venid hijos, escuchadme, El temor de YHVH os enseñaré. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Kaf. Los ricos se empobrecen, pasan hambre; mas quien busca al Señor no carecerá de bien alguno. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Venid, hijos, oídme; el temor de Jehová os enseñaré. |
Perece el león por falta de presa, y los cachorros de la leona son desperdigados.
Porque él apagó la sed de los sedientos y colmó de comida a los hambrientos.
El temor del Señor es el principio de la sabiduría, los que la practican son gente lista: su alabanza permanece eternamente.
En su casa habrá fortuna y bienestar, su justicia permanece para siempre.
Yo quiero enseñarte, indicarte el camino que tienes que seguir, quiero darte un consejo, quiero mirar por ti.
Fieles del Señor, venid a escuchar, os contaré lo que él hizo por mí.
El temor del Señor es el principio de la sabiduría. Los insensatos desprecian la sabiduría y la disciplina.
Enseña al niño el buen camino, y aun cuando sea viejo no se apartará de él.
Escuchad, hijos míos, la instrucción de un padre y estad atentos a conocer la prudencia,
Ahora, pues, hijo mío, escúchame, y presta atención a las palabras de mi boca:
Yo amo a los que me aman, y los que me buscan con diligencia me encuentran.
Por tanto, hijos míos, escuchadme: dichosos los que siguen mis caminos;
Goza, joven, de tu mocedad, y que tu corazón disfrute en los días de tu juventud. Sigue los caminos de tu corazón y los deseos de tus ojos. Pero sabe que de todo esto Dios te pedirá cuentas.
¿A quién va a enseñar la lección? ¿A quién quiere explicar sus sermones? ¡A los niños apenas destetados, a los recién apartados del pecho!
'Hijos míos, voy a estar ya muy poco con vosotros. Me buscaréis, pero os digo lo mismo que dije a los judíos: Adonde yo voy no podéis ir vosotros.
Desde la infancia conoces las Sagradas Escrituras, las cuales pueden darte la sabiduría que conduce a la salvación por la fe en Jesucristo.