Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Salmos 27:3 - Biblia Martin Nieto

Aunque un ejército acampe contra mí, mi corazón no teme; aunque una guerra estalle contra mí, estoy tranquilo.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Aunque un ejército poderoso me rodee, mi corazón no temerá. Aunque me ataquen, permaneceré confiado.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Si me sitia un ejército contrario, mi corazón no teme; si una guerra estalla contra mí, aún tendré confianza.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Aunque un ejército acampe contra mí, no temerá mi corazón, Aunque contra mí se levante guerra, yo estaré confiado.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Aun cuando acampara contra mí una hueste, mi corazón no temería; aun cuando arrecie contra mí el combate, aun entonces confiaré.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Aunque un ejército acampe contra mí, no temerá mi corazón: Aunque contra mí se levante guerra, yo estaré confiado.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Salmos 27:3
17 Tagairtí Cros  

dijo: 'Atención, habitantes de Judá y de Jerusalén, y tú, oh rey Josafat. Esto os dice el Señor: No temáis ni os asustéis ante esta ingente multitud, porque la batalla no es cosa vuestra, sino de Dios.


¿No te daba confianza tu piedad? ¿No era tu esperanza la perfección de tu conducta?


no tiene miedo de noticias malas, su corazón está firme, confiado en el Señor;


Yo me acuesto, me duermo y me despierto: el Señor es mi apoyo.


No temo a los hombres sin cuento que por doquier se apostan contra mí.


prefieres propósitos funestos, oh lengua engañadora.


sin dejaros intimidar en lo más mínimo ante vuestros adversarios; lo que para ellos es señal de perdición, lo es en cambio para vosotros de salvación, y esto por obra de Dios.


Si, a pesar de todo, os veis obligados a padecer por la justicia ¡dichosos vosotros!. No temáis sus amenazas, ni os turbéis.


No te acobardes ante lo que vas a sufrir. El diablo va a encarcelar a algunos de vosotros; es para poneros a prueba; sufriréis una prueba de diez días. Sé fiel hasta la muerte, y te daré la corona de la vida.


Cuando comenzó de nuevo la guerra, David salió a campaña contra los filisteos; les infligió una gran derrota y se dieron a la fuga.