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Salmos 26:8 - Biblia Martin Nieto

Señor, yo amo la casa donde tú resides, el lugar donde tu gloria habita.

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Biblia Reina Valera 1960

Jehová, la habitación de tu casa he amado, Y el lugar de la morada de tu gloria.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Amo tu santuario, Señor, el lugar donde habita tu gloriosa presencia.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Señor, cuánto amo la casa en que moras, y el lugar donde reside tu gloria.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Oh YHVH, yo amo la Casa donde habitas, Y el lugar donde reside tu gloria.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Amo, Señor, la casa donde habitas, el lugar de la morada de tu gloria.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Jehová, la habitación de tu casa he amado, y el lugar donde tu gloria habita.

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Salmos 26:8
22 Tagairtí Cros  

Entonces el rey dijo a Sadoc: 'Vuelve el arca de Dios a la ciudad. Si el Señor me favorece, él me hará volver para ver el arca y su santuario.


Además, todo el oro y plata de mi propiedad personal lo doy por amor del templo de mi Dios;


de modo que los sacerdotes no pudieron continuar su servicio a causa de la nube, pues la gloria del Señor había llenado el templo de Dios.


Cuando Salomón terminó su oración, bajó fuego del cielo, que consumió los holocaustos y las víctimas, y la gloria del Señor llenó el templo,


de manera que los sacerdotes no podían entrar en él, pues la gloria del Señor lo llenaba.


Por la casa del Señor, nuestro Dios, te deseo la felicidad.


Mis lágrimas son mi pan de día y de noche, y a lo largo del día me repiten: '¿Dónde está tu Dios?'.


oh Dios, contempla nuestro escudo, fíjate en el rostro de tu ungido.


Señor, puesto que me has salvado, haremos resonar nuestros instrumentos todos los días de nuestra vida en el templo del Señor.


Y Ezequías preguntó: '¿Por qué señal conoceré que he de subir de nuevo al templo del Señor?'.


Entonces el espíritu me arrebató y oí detrás de mí el ruido de una gran trepidación, mientras la gloria del Señor se levantaba de su sitio;


A los tres días lo encontraron en el templo sentado en medio de los doctores, oyéndolos y preguntándoles.


Les contestó: '¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debo ocuparme en los asuntos de mi Padre?'.