Salmos 17:1 - Biblia Martin Nieto Oración de David Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Oye, oh Jehová, una causa justa; está atento a mi clamor. Escucha mi oración hecha de labios sin engaño. Biblia Nueva Traducción Viviente Oh Señor, oye mi ruego pidiendo justicia; escucha mi grito de auxilio. Presta oído a mi oración, porque proviene de labios sinceros. Biblia Católica (Latinoamericana) Escuha mi grito, Señor, atiende a mis clamores, presta atención a mi plegaria pues no hay engaño en mis labios. La Biblia Textual 3a Edicion Oración de David. Oye, oh YHVH, una causa justa, está atento a mi clamor, Escucha mi oración hecha de labios sin engaño. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Oración. De David. Oye, Señor, la causa justa, atiende a mi clamor, escucha mi oración, de labios no embusteros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Oración de David Oye, oh Jehová, el derecho; atiende a mi clamor; escucha mi oración hecha de labios sin engaño. |
En adelante mis ojos estarán abiertos y mis oídos atentos a las plegarias que se hagan en este lugar.
Que tus oídos estén atentos y tus ojos abiertos para escuchar la plegaria de tu siervo, que yo derramo ahora ante ti, día y noche, por los israelitas tus siervos, confesando los pecados que ellos han cometido contra ti. Yo mismo y la casa de mi padre hemos pecado;
que no quede un calumniador en el país y la desgracia lleve al violento a la ruina.
Yo te grito, Señor: 'Tú eres mi refugio, tú eres todo lo que tengo en esta vida'.
el Señor está cerca de los que lo invocan, de los que lo invocan con sinceridad.
Me hiciste escapar de las sediciones de los pueblos, me pusiste a la cabeza de naciones, un pueblo que yo no conocía, ahora me sirve.
Hazme justicia, oh Dios, y defiende mi causa contra esta mala gente, líbrame del hombre falso y criminal.
Que la asamblea de los pueblos se reúna en torno a ti y presídela tú desde tu trono.
Señor, Dios omnipotente, escucha mi plegaria; atiéndeme, oh Dios de Jacob;
Ha dicho el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí tan sólo con palabras, y sólo de labios me honra, mientras su corazón está lejos de mí, siendo así su religión para conmigo sólo un mandamiento humano, una lección aprendida,
Y con todo esto, Judá, su pérfida hermana, no ha vuelto a mí de todo corazón, su arrepentimiento es falso, dice el Señor.
Este pueblo me honra con sus labios, pero su corazón está lejos de mí;
Jesús vio a Natanael, que se le acercaba, y dijo de él: 'Éste es un israelita auténtico, en el que no hay engaño'.
Queridos míos, si nuestra conciencia no nos acusa, podemos estar tranquilos ante él.