Se rebeló asimismo contra el rey Nabucodonosor, al cual había prestado juramento en el nombre de Dios. Fue terco y obstinado y no quiso convertirse al Señor, Dios de Israel.
Salmos 15:4 - Biblia Martin Nieto desprecia al criminal y honra a los que temen al Señor; el que, si jura en su perjuicio, ya no se desdice, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado, Pero honra a los que temen a Jehová. El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia; Biblia Nueva Traducción Viviente Los que desprecian a los pecadores descarados, y honran a quienes siguen fielmente al Señor y mantienen su palabra aunque salgan perjudicados. Biblia Católica (Latinoamericana) el que menosprecia al criminal,
pero honra a los que temen al Señor;' La Biblia Textual 3a Edicion Aquel ante cuyos ojos el vil es menospreciado, Pero honra a los que temen a YHVH. El que jurando aun en perjuicio suyo, No por eso deja de cumplir. Biblia Serafín de Ausejo 1975 que en sus ojos desprecia al reprobado y estima a los que temen al Señor; que, si jura, ni aun en su daño se retracta; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Aquel a cuyos ojos es menospreciado el vil; mas honra a los que temen a Jehová; el que aun jurando en daño suyo, no cambia; |
Se rebeló asimismo contra el rey Nabucodonosor, al cual había prestado juramento en el nombre de Dios. Fue terco y obstinado y no quiso convertirse al Señor, Dios de Israel.
Todos los servidores del rey, que estaban al servicio de la puerta de palacio, se arrodillaban y postraban cuando Amán pasaba, según había ordenado el rey. Pero Mardoqueo no se arrodillaba ni se postraba ante él.
escogeré a los leales del país para que vivan a mi lado; el de conducta intachable será mi servidor;
Ellos, en cambio, veneran a los dioses que hay aquí en la tierra, malditos los que en ellos se complacen.
'También sabéis que se dijo a los antiguos: No jurarás en falso, sino que cumplirás al Señor tus juramentos.
Cuando él hablaba de la justicia, la continencia y el juicio futuro, Félix, aterrorizado, dijo: 'Por ahora vete; te llamaré en ocasión oportuna'.
Nos tributaron muchos honores y, al marchar, nos suministraron todo lo necesario.
Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida porque amamos a los hermanos. El que no ama permanece en la muerte.
Cuando la vio, rasgó sus vestiduras y gritó: '¡Ah, hija mía, infortunado de mí! Tú eres la causa de mi desgracia, pues he hecho una promesa al Señor y no puedo desdecirme'.