Abrahán decía que Sara, su mujer, era su hermana. Y Abimelec, rey de Guerar, mandó que le trajeran a Sara.
Proverbios 6:29 - Biblia Martin Nieto Tal es el que se acerca a la mujer de su prójimo; cualquiera que la toque no quedará impune. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; No quedará impune ninguno que la tocare. Biblia Nueva Traducción Viviente Así le sucederá al hombre que duerme con la esposa de otro hombre. El que la abrace no quedará sin castigo. Biblia Católica (Latinoamericana) Lo mismo pasa con el que va donde la mujer de su prójimo: el que la toca no quedará sin castigo. La Biblia Textual 3a Edicion Así será con el que se llega a la mujer de su prójimo, Ninguno que la toque quedará impune. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Así sucede con la mujer ajena: no queda impune quien la toca. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así el que entrare a la esposa de su prójimo; no será sin culpa cualquiera que la tocare. |
Abrahán decía que Sara, su mujer, era su hermana. Y Abimelec, rey de Guerar, mandó que le trajeran a Sara.
Una vez terminado el luto, David mandó a buscarla, la llevó a su casa y la tomó por mujer. Ella dio a luz un hijo. Pero esto que hizo David desagradó al Señor.
Ajitófel respondió a Absalón: 'Acuéstate con las concubinas de tu padre que él dejó para guardar el palacio; así sabrá todo Israel que te has hecho odioso a tu padre y se fortalecerán las manos de todos los que te siguen'.
No desearás la casa de tu prójimo, ni su mujer, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna que a él le pertenezca'.
si no banquetea en los montes ni alza sus ojos a los ídolos de la casa de Israel; si no deshonra a la mujer de su prójimo ni se acerca a la mujer en la menstruación;
Hay quien comete adulterio con la mujer de su prójimo, quien mancha con crimen nefando a su nuera, quien fuerza a su hermana, a la hija de su propio padre.
Confiáis en vuestras espadas, cometéis acciones detestables, cada cual deshonra a la mujer de su prójimo, ¿y vais a poseer el país?
En cuanto al hombre que comete adulterio con una mujer casada: el hombre que comete adulterio con la mujer de su prójimo, será castigado con la muerte, él y la mujer.
Yo vendré a juzgaros; seré testigo acusador contra los hechiceros, contra los adúlteros y los perjuros, contra los que explotan al jornalero, a la viuda y al huérfano y violan el derecho del extranjero sin ningún temor de mí -dice el Señor todopoderoso-.
Sobre lo que me habéis escrito, os digo lo siguiente. Está bien renunciar al matrimonio;