Las palabras de los chismosos son apetitosos bocados, llegan hasta lo más hondo de las entrañas.
Las palabras del chismoso son como bocados suaves, Y penetran hasta las entrañas.
Los rumores son deliciosos bocaditos que penetran en lo profundo del corazón.
Las palabras del mendigo son como golosinas; se deslizan suavemente hasta el fondo de las entrañas.
Las palabras del chismoso son manjares, Que penetran hasta el fondo de sus entrañas.
Las palabras del denigrante son golosinas que descienden al fondo de las entrañas.
Las palabras del chismoso son como estocadas, y penetran hasta lo más profundo del vientre.
Cuando el idumeo Doeg vino a anunciar a Saúl: 'David ha entrado en casa de Ajimélec'.
Las palabras imprudentes hieren como una espada, la lengua de los sabios cura las heridas.
El hombre perverso siembra la contienda, el chismoso divide los amigos.
La boca del necio es su ruina, sus labios son un lazo para su propia vida.
El que es negligente en su trabajo es hermano del destructor.
No andarás difamando a los tuyos ni pondrás en peligro la vida del prójimo con falsas acusaciones: yo, el Señor.