El rey concede su favor a los labios justos, y ama al que habla con rectitud.
Los labios justos son el contentamiento de los reyes, Y estos aman al que habla lo recto.
El rey se complace en las palabras de labios justos; ama a quienes hablan con la verdad.
El que manda con justicia es apreciado por el rey; él ama a los hombres rectos.
Los reyes aprueban los labios sinceros, Y aman a quien habla rectamente.
El rey se complace en los labios justos y estima a quien habla con rectitud.
Los labios justos son el deleite de los reyes; y aman al que habla lo recto.
El rey concede su favor al servidor inteligente, pero su ira pierde al inepto.
El rey debe odiar la injusticia, porque el trono está establecido en la justicia.
El furor del rey es mensajero de muerte, pero un hombre sabio le apacigua.
El rey ama a los puros de corazón, el que tiene la gracia en sus labios es su amigo.