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Mateo 20:16 - Biblia Martin Nieto

Así pues, los últimos serán los primeros, y los primeros los últimos'.

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Biblia Reina Valera 1960

Así, los primeros serán postreros, y los postreros, primeros; porque muchos son llamados, mas pocos escogidos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Así que los que ahora son últimos, ese día serán los primeros, y los primeros serán los últimos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Así sucederá: los últimos serán primeros, y los primeros serán últimos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Así, los postreros serán primeros,° y los primeros, postreros.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

De esta suerte, los últimos serán primeros, y los primeros últimos'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Así los primeros serán postreros, y los postreros, primeros: Porque muchos son llamados, mas pocos escogidos.

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Mateo 20:16
18 Tagairtí Cros  

'Muchos primeros serán los últimos, y los últimos los primeros'.


¿Cuál de los dos hizo la voluntad de su padre?'. Le contestaron: 'El primero'. Jesús dijo: 'Os aseguro que los publicanos y las prostitutas entrarán en el reino de Dios antes que vosotros.


Porque muchos son los llamados, pero pocos los escogidos'.


'Entrad por la puerta estrecha. Que es ancha la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y son muchos los que entran por ella.


'Muchos primeros serán los últimos, y los últimos los primeros'.


Pues os digo que ninguno de los invitados probará mi banquete'.


Pues bien, os digo que habrá más alegría en el cielo por un pecador que se arrepiente que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentirse'.


Por lo cual te digo que si ama mucho es porque se le han perdonado sus muchos pecados. Al que se le perdona poco ama poco'.


La ley llegó para que abundase el delito; pero donde abundó el delito, sobreabundó la gracia,


Y a los que predestinó, los llamó; y a los que llamó, los justificó; y a los que justificó, los hizo partícipes de su gloria.


Entonces, ¿qué diremos? Que los paganos, que no perseguían la justicia, alcanzaron la justicia, la justicia de la fe;


Por todo ello damos continuamente gracias a Dios: porque, al recibir la palabra de Dios que os predicamos, la abrazasteis no como palabra de hombre, sino como lo que es en verdad, la palabra de Dios, que permanece vitalmente activa en vosotros, los creyentes.