Su furia me desgarra y me persigue, rechinando sus dientes contra mí. Mis adversarios aguzan contra mí sus ojos.
Marcos 9:18 - Biblia Martin Nieto y cuando se apodera de él, lo tira al suelo, echa espumarajos, rechina los dientes y se queda tieso. He pedido a tus discípulos que lo echasen, pero no han podido'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 el cual, dondequiera que le toma, le sacude; y echa espumarajos, y cruje los dientes, y se va secando; y dije a tus discípulos que lo echasen fuera, y no pudieron. Biblia Nueva Traducción Viviente Y, siempre que este espíritu se apodera de él, lo tira violentamente al suelo y él echa espuma por la boca, rechina los dientes y se pone rígido. Así que les pedí a tus discípulos que echaran fuera al espíritu maligno, pero no pudieron hacerlo. Biblia Católica (Latinoamericana) En cualquier momento el espíritu se apodera de él, lo tira al suelo y el niño echa espuma por la boca, rechina los dientes y se queda rígido. Les pedí a tus discípulos que echaran ese espíritu, pero no pudieron. La Biblia Textual 3a Edicion y dondequiera que lo ataca lo derriba, y echa espumarajos y cruje los dientes y se pone rígido. Y dije a tus discípulos que lo echaran, pero no fueron capaces. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y cuando se apodera de él, lo tira por tierra; y el niño echa espumarajos, rechina los dientes y se queda rígido. Les dije a tus discípulos que lo expulsaran, pero ellos no han podido'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) el cual, dondequiera que le toma, le desgarra; y echa espumarajos, y cruje los dientes, y se va secando; y dije a tus discípulos que le echasen fuera, y no pudieron. |
Su furia me desgarra y me persigue, rechinando sus dientes contra mí. Mis adversarios aguzan contra mí sus ojos.
El criminal, al verlo, se enfurece, se consume de rabia, rechinando los dientes. El propósito del criminal será un fracaso.
Y una mujer cananea salió de aquellos contornos y se puso a gritar: '¡Ten compasión de mí, Señor, hijo de David! Mi hija está atormentada por un demonio'.
pero los hijos del reino serán echados a las tinieblas de fuera: allí será el llanto y el crujir de dientes'.
Os aseguro que el que sin dudar interiormente lo más mínimo, sino creyendo que se cumplirán sus palabras, diga a ese monte: Quítate de ahí y échate al mar, lo alcanzará.
Uno de entre la gente le respondió: 'Maestro, te he traído a mi hijo, que tiene un espíritu mudo;
Jesús respondió: '¡Gente incrédula! ¿Hasta cuándo tendré que estar con vosotros? ¿Hasta cuándo tendré que soportaros? Traédmelo'.
Y se lo llevaron. Apenas el espíritu vio a Jesús, retorció violentamente al muchacho, el cual se cayó al suelo revolcándose y echando espumarajos.
Y el espíritu, dando gritos y haciendo que el muchacho se retorciera violentamente, salió de él, dejándolo como muerto, tanto que muchos decían que estaba muerto.
Al oír esto estallaban de rabia sus corazones, y rechinaban los dientes contra él.
olas bravías del mar, que arrojan la espuma de sus impurezas; estrellas errantes, a las que est reservada la oscuridad de las tinieblas por toda la eternidad.