Yo pongo enemistad entre ti y la mujer, entre tu linaje y el suyo; él te aplastará la cabeza y tú sólo tocarás su calcañal'.
Marcos 12:7 - Biblia Martin Nieto Pero los viñadores se dijeron: Éste es el heredero. Matémoslo, y nos quedaremos con su herencia. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Mas aquellos labradores dijeron entre sí: Este es el heredero; venid, matémosle, y la heredad será nuestra. Biblia Nueva Traducción Viviente »Los agricultores se dijeron unos a otros: “Aquí viene el heredero de esta propiedad. ¡Matémoslo y nos quedaremos con la propiedad!”. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero los viñadores se dijeron entre sí: 'Este es el heredero, la viña será para él; matémosle y así nos quedaremos con la propiedad. La Biblia Textual 3a Edicion Pero aquellos labradores se dijeron: Éste es el heredero. Venid, matémoslo, y la heredad será nuestra. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero aquellos viñadores se dijeron unos a otros: 'Éste es el heredero. Vamos a matarlo y la heredad será nuestra'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero aquellos labradores dijeron entre sí: Éste es el heredero, venid, matémosle, y la heredad será nuestra. |
Yo pongo enemistad entre ti y la mujer, entre tu linaje y el suyo; él te aplastará la cabeza y tú sólo tocarás su calcañal'.
Vamos a matarlo: lo echamos en una cisterna y luego decimos que una bestia feroz lo devoró. Veremos en qué paran sus sueños'.
Esto dice el Señor, el redentor, el Santo de Israel, al despreciado, al aborrecido de las gentes, al esclavo de los tiranos: Los reyes, al verte, se levantarán, los príncipes se inclinarán por causa del Señor, que es leal, del Santo de Israel, que te ha elegido.
Entonces Herodes, al ver que los magos se habían burlado de él, montó en cólera y mandó matar a todos los niños de Belén y de todo su territorio, de dos años para abajo, según el tiempo que había calculado por los magos.
Cuando llegó el tiempo de la vendimia, mandó sus criados a los viñadores para recibir su parte.
Intentaban prenderlo, porque comprendieron que la parábola iba por ellos; pero temían a la gente. Lo dejaron, y se fueron.
Aún le quedaba uno, su hijo querido. Se lo envió el último, pensando: Respetarán a mi hijo.
Conforme al plan proyectado y previsto por Dios, os lo entregaron, y vosotros lo matasteis crucificándolo por manos de los paganos;
'¿No os ordenamos solemnemente que no enseñaseis en nombre de ése? Y, sin embargo, habéis llenado Jerusalén de vuestra doctrina y queréis hacernos responsables de la sangre de este hombre'.
¿A qué profeta no persiguieron vuestros padres? Mataron a los que predijeron la venida del Justo, del cual vosotros ahora sois los traidores y asesinos;
en estos días, que son los últimos, nos ha hablado por el Hijo, a quien ha constituido heredero de todas las cosas, por quien hizo también el universo.