tributad al Señor la gloria de su nombre, adorad al Señor con esplendor sagrado.
Malaquías 3:8 - Biblia Martin Nieto ¿Puede un hombre engañar a Dios? Sí, vosotros me engañáis y andáis diciendo: '¿En qué te hemos engañado?'. En los diezmos y en los tributos sagrados. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas. Biblia Nueva Traducción Viviente »¿Debería el pueblo estafar a Dios? ¡Sin embargo, ustedes me han estafado! »Pero ustedes preguntan: “¿Qué quieres decir? ¿Cuándo te hemos estafado?”. »Me han robado los diezmos y ofrendas que me corresponden. Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Puede acaso un hombre engañar a Dios? Pero ustedes me están engañando. Ustedes dirán: '¿En qué cosa te hemos engañado?' Pues, con los diezmos y tributos sagrados. La Biblia Textual 3a Edicion ¿Robará el hombre a ’Elohim? ¡Pues vosotros me habéis robado! Pero decís: ¿En qué te hemos robado? ¡En los diezmos y en las ofrendas!° Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Puede un hombre defraudar a Dios? Pero vosotros intentáis defraudarme y preguntáis: '¿En qué te defraudamos?'. ¡En los diezmos y en las ofrendas! Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En los diezmos y las ofrendas. |
tributad al Señor la gloria de su nombre, adorad al Señor con esplendor sagrado.
Hay quien da libremente y sus riquezas aumentan; hay quien ahorra más de lo razonable y se empobrece.
No me has ofrecido corderos en holocausto, ni me has honrado con tus sacrificios. Yo no te forcé a hacerme ofrendas, no he insistido en que me ofrecieras incienso.
A partir del quinto año podréis comer los frutos. Así el árbol os dará más. Yo, el Señor, vuestro Dios.
Entonces me dijo: Ésta es la maldición que se extiende sobre toda la tierra. En una cara del libro está escrito: Todo ladrón será eliminado, y en la otra: Todo el que jura en falso será eliminado.
Andáis diciendo: '¡Qué aburrimiento!', y me despreciáis -dice el Señor todopoderoso- trayendo la res robada, coja y enferma, y presentándomela como ofrenda. ¿Es que puedo yo aceptarla de vuestras manos? -dice el Señor todopoderoso-.
Cuando afirmáis que la mesa del Señor no tiene ninguna importancia; que no es nada malo ofrecer en sacrificio una res ciega, coja o enferma. ¡Ofrécesela, pues, a tu gobernador, a ver si la acepta y te recibe bien! -dice el Señor todopoderoso-.
Respondieron: 'Del césar'. Él les dijo: 'Pues dad al césar lo que es del césar y a Dios lo que es de Dios'.
Él les dijo: 'Pues dad al césar lo que es del césar y a Dios lo que es de Dios'. Y quedaron admirados ante esa respuesta.
Él les dijo: 'Pues dad al césar lo que es del césar y a Dios lo que es de Dios'.
Pagad a cada uno lo que le corresponda: contribuciones, impuestos, respeto, honores, lo que haya que darle.
Tú, que dices que no hay que cometer adulterio, ¿por qué lo cometes? Tú, que aborreces a los ídolos, ¿por qué saqueas los templos?
Israel ha pecado, ha violado la alianza que hice con ellos; han tomado cosas que estaban consagradas al exterminio, han robado, han mentido y las han escondido entre sus enseres.