No os manchéis con ninguna de estas prácticas, como se han manchado las naciones que yo echo delante de vosotros.
Jueces 20:5 - Biblia Martin Nieto Los de Guibeá durante la noche rodearon la casa donde yo estaba con idea de matarme, y de tal manera abusaron de mi concubina que murió. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y levantándose contra mí los de Gabaa, rodearon contra mí la casa por la noche, con idea de matarme, y a mi concubina la humillaron de tal manera que murió. Biblia Nueva Traducción Viviente Esa noche, algunos de los ciudadanos prominentes de Guibeá rodearon la casa con la intención de matarme, y violaron a mi concubina hasta que quedó muerta. Biblia Católica (Latinoamericana) y los vecinos de Guibea decidieron hacerme daño. Durante toda la noche rodearon la casa donde yo estaba con la intención de matarme; violaron a mi concubina de tal manera que ella murió. La Biblia Textual 3a Edicion y los hombres de Gabaa se alzaron contra mí y cercaron la casa de noche, con intención de matarme, y humillaron a mi concubina de tal manera que murió. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y se alzaron contra mí los príncipes de Guibeá, rodearon la casa durante la noche con intención de asesinarme y tanto violaron a mi concubina que murió. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y levantándose contra mí los de Gabaa, rodearon sobre mí la casa por la noche, con idea de matarme, y amancillaron a mi concubina tanto que ella murió. |
No os manchéis con ninguna de estas prácticas, como se han manchado las naciones que yo echo delante de vosotros.
la sacarán fuera de la casa de su padre y toda la ciudad la matará a pedradas, por haber cometido una acción infame en Israel prostituyendo la casa de su padre. Así extirparás la maldad de en medio de ti.
los dos serán sacados a las puertas de la ciudad y matados a pedradas: la joven por no haber pedido socorro estando en la ciudad, y el hombre por haber deshonrado a la mujer de su prójimo.
El que sea sorprendido con el objeto consagrado al exterminio será quemado, él y todo lo que le pertenece, por haber roto la alianza con el Señor y haber cometido una infamia con Israel'.
Cuando más contentos estaban, unos hombres pervertidos de la ciudad empezaron a dar golpes a la puerta y a decir al anciano dueño de la casa: 'Sácanos al hombre que ha entrado en tu casa para que abusemos de él'.
Él le dijo: 'Levántate y vámonos'. Ella no respondió. Entonces la cargó sobre su asno y se puso en camino para ir a su casa.
Entonces el levita, el marido de la víctima, les dijo: 'Yo llegué con mi concubina a Guibeá de Benjamín para pasar la noche.