Entre tanto, las tropas que había despedido Amasías para no llevarlas con él a la guerra invadieron las ciudades de Judá, desde Samaría hasta Bejorón, mataron a tres mil personas y se apoderaron de un gran botín.
Jueces 20:48 - Biblia Martin Nieto Los israelitas atacaron a los de Benjamín y los pasaron a espada, a los hombres, a los animales y a todo lo que encontraron. A todas las ciudades que encontraron les prendieron fuego. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y los hombres de Israel volvieron sobre los hijos de Benjamín, y los hirieron a filo de espada, así a los hombres de cada ciudad como a las bestias y todo lo que fue hallado; asimismo pusieron fuego a todas las ciudades que hallaban. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces los israelitas regresaron al territorio de Benjamín y en todas las ciudades masacraron a todo ser viviente: a la gente, a los animales y a todo lo que encontraron. También quemaron por completo todas las ciudades por las que pasaron. Biblia Católica (Latinoamericana) Mientras tanto los israelitas destruyeron todos los pueblos de Benjamín con los hombres, el ganado y todo lo que allí había. Luego prendieron fuego a todos los pueblos que encontraron. La Biblia Textual 3a Edicion Los de Israel se volvieron contra los hijos de Benjamín y los mataron a filo de espada, tanto hombres como animales, y todo lo que fue hallado, y prendieron fuego a cuantas ciudades hallaron. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los israelitas se volvieron contra los benjaminitas y pasaron a filo de espada a cuanto quedaba en las ciudades, hombres y ganados, y prendieron fuego a todas las ciudades que encontraron a su paso. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los hombres de Israel se volvieron contra los hijos de Benjamín, y los mataron a filo de espada, así a los hombres de cada ciudad, como a las bestias y todo lo que encontraron; también pusieron fuego a todas las ciudades que hallaron. |
Entre tanto, las tropas que había despedido Amasías para no llevarlas con él a la guerra invadieron las ciudades de Judá, desde Samaría hasta Bejorón, mataron a tres mil personas y se apoderaron de un gran botín.
Un hermano ayudado por su hermano es una ciudad fuerte, y las querellas son como cerrojos de fortaleza.
Seiscientos hombres pudieron huir al desierto, a la roca de Rimón, y permanecieron allí durante cuatro meses.
Los israelitas habían hecho este juramento en Mispá: 'Ninguno de nosotros dará su hija a ninguno de Benjamín por mujer'.
Los de Benjamín lo hicieron así y tomaron de entre las que bailaban una cada uno. Después volvieron cada uno a su heredad, edificaron las ciudades y se establecieron en ellas.