No padecerán hambre ni sed, no les alcanzará ni el viento árido ni el sol, porque el que se apiada de ellos los guiará y los conducirá a manantiales de agua.
Juan 6:35 - Biblia Martin Nieto Jesús les dijo: 'Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí no tendrá sed jamás. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús les respondió: —Yo soy el pan de vida. El que viene a mí nunca volverá a tener hambre; el que cree en mí no tendrá sed jamás. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús les dijo: 'Yo soy el pan de vida. El que viene a mí nunca tendrá hambre y el que cree en mí nunca tendrá sed. La Biblia Textual 3a Edicion Jesús les dijo: ¡Yo soy el pan de la vida; el que a mí viene nunca tendrá hambre, y el que cree en mí no tendrá sed jamás! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jesús les contestó: 'Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre; el que cree en mí jamás tendrá sed'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás. |
No padecerán hambre ni sed, no les alcanzará ni el viento árido ni el sol, porque el que se apiada de ellos los guiará y los conducirá a manantiales de agua.
Venid a mí todos los que estáis cansados y oprimidos, y yo os aliviaré.
¡Ay de vosotros, los que ahora estáis hartos, porque tendréis hambre! ¡Ay de vosotros, los que ahora reís, porque gemiréis y lloraréis!
La mujer le dijo: 'Señor, dame esa agua, para no tener sed ni venir aquí a sacarla'.
Todos los que el Padre me da vendrán a mí. Al que viene a mí no lo rechazo,
Los judíos criticaban a Jesús porque había dicho: 'Yo soy el pan que ha bajado del cielo',
Y añadió: 'Por esto os he dicho que nadie puede venir a mí si no le es dado por el Padre'.
El Espíritu y la esposa dicen: 'Ven'. El que escuche, diga: 'Ven'. El que tenga sed, que venga; y el que quiera, tome gratuitamente del agua de la vida.
Ellos ya no tendrán más hambre ni sed; no sentirán más el fuego ardiente del sol;