Voz como de serpiente que silba; sí, avanza en masa, se echan sobre ella con sus hachas, como si fueran leñadores.
Josué 9:21 - Biblia Martin Nieto Y los jefes añadieron: 'Que vivan, pero que sean los leñadores y aguadores al servicio de toda la comunidad'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Dijeron, pues, de ellos los príncipes: Dejadlos vivir; y fueron constituidos leñadores y aguadores para toda la congregación, concediéndoles la vida, según les habían prometido los príncipes. Biblia Nueva Traducción Viviente Déjenlos vivir». Así que los hicieron cortar leña y llevar agua para toda la comunidad, tal como lo indicaron los líderes israelitas. Biblia Católica (Latinoamericana) pero serán los siervos de toda la comunidad, partirán la leña e irán a buscar el agua'. Eso decidieron los jefes. La Biblia Textual 3a Edicion Y los jefes dijeron con respecto a ellos: Dejadlos vivir. Y fueron leñadores y aguadores para toda la comunidad, según les habían prometido los jefes. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y añadieron los jefes: 'Que sigan viviendo; pero que sean leñadores y aguadores de toda la comunidad'. Y se hizo como habían determinado los jefes. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los príncipes les dijeron: Dejadlos vivir; pero sean leñadores y aguadores para toda la congregación, como los príncipes les habían prometido. |
Voz como de serpiente que silba; sí, avanza en masa, se echan sobre ella con sus hachas, como si fueran leñadores.
vuestros niños, mujeres y el extranjero que vive contigo en tu campamento, desde el leñador al aguador,
con el fin de comprometerse, bajo juramento, en la alianza que el Señor, tu Dios, hace hoy contigo;
Cuando supo Adonisedec, rey de Jerusalén, que Josué había tomado Ay y la había entregado al exterminio, tratando a Ay y a su rey como había tratado a Jericó y a su rey, y que los habitantes de Gabaón habían hecho las paces con Israel y que estaban con él,
Josué hizo un pacto de paz con ellos comprometiéndose a perdonarles la vida, y los jefes del pueblo juraron hacer lo mismo.
Tenemos que dejarles vivir, para no atraer sobre nosotros la cólera del Señor por el juramento que les hemos hecho'.
Desde ahora mismo sois malditos, y no faltará de entre vosotros el esclavo que corte la leña y lleve el agua para la casa de mi Dios'.