El Señor Dios formó al hombre del polvo de la tierra, le insufló en sus narices un hálito de vida y así el hombre llegó a ser un ser viviente.
Job 12:10 - Biblia Martin Nieto En sus manos está el alma de todo ser viviente y el espíritu de toda carne de hombre. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 En su mano está el alma de todo viviente, Y el hálito de todo el género humano. Biblia Nueva Traducción Viviente ya que la vida de todo ser viviente está en sus manos, así como el aliento de todo ser humano. Biblia Católica (Latinoamericana) El, que tiene en su mano el soplo de todo viviente
y el espíritu de todo ser humano. La Biblia Textual 3a Edicion En cuya mano está el alma de todo viviente, Y el hálito de toda la humanidad? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él dispone del alma de todo viviente y del espíritu de toda carne humana. Biblia Reina Valera Gómez (2023) En su mano está el alma de todo viviente, y el hálito de todo ser humano. |
El Señor Dios formó al hombre del polvo de la tierra, le insufló en sus narices un hálito de vida y así el hombre llegó a ser un ser viviente.
Yo voy a enviar sobre la tierra un diluvio de aguas para destruir a todo ser viviente que hay bajo el cielo. Todo cuanto hay sobre la tierra morirá.
¿Qué esperanza tiene el malvado cuando suplica, cuando hacia Dios levanta su alma?
Me ha hecho el espíritu de Dios, el soplo del todopoderoso me da vida.
si escondes tu rostro, se acobardan; si retiras tu soplo, expiran y retornan al polvo;
Ciertamente he examinado todo esto, y he comprobado que los justos y los sabios y sus obras están en las manos de Dios. El hombre no conoce ni el amor ni el odio, y ambas cosas son a sus ojos
Esto dice el Señor, Dios, el que creó los cielos y los desplegó, el que asentó la tierra y sus productos, el que da aliento al pueblo que la habita y soplo a los seres que se mueven en ella:
Porque no quiero discutir eternamente y estar por siempre airado, pues ante mí sucumbiría el espíritu y las almas que yo he creado.
más aún, te has levantado contra el Señor del cielo: has mandado traer las copas de su templo, y tú, tus dignatarios, tus mujeres y tus concubinas habéis bebido vino en ellas. Has celebrado a los dioses de oro y plata, de bronce, hierro, madera y piedra, que no ven, ni oyen, ni entienden, pero no has glorificado al Dios que tiene en sus manos tu propio aliento y todos tus caminos.
Cayeron sobre sus rostros y dijeron: '¡Oh, Dios, Dios del espíritu de todo viviente! ¿Ha pecado uno solo, y tú te irritas contra toda la comunidad?'.
Lo que nace de la carne es carne, y lo que nace del Espíritu es espíritu.
Ni es servido por manos humanas, como si necesitase algo él, que da a todos la vida, el aliento y todas las cosas;
ya que en él vivimos, nos movemos y existimos, como alguno de vuestros poetas ha dicho también: 'Porque somos de su linaje'.