Tú dices: 'Mi conducta es pura, ante tus ojos soy irreprochable'.
Tú dices: Mi doctrina es pura, Y yo soy limpio delante de tus ojos.
Tú afirmas: “Mis creencias son puras” y “estoy limpio a los ojos de Dios”.
Tú has dicho: 'Es pura mi conducta y soy irreprochable a los ojos de Dios.
Pues has dicho: Mi enseñanza es pura, Y: Soy limpio ante tus ojos.
Tú has dicho: Pura es mi conducta; limpio estoy en tu presencia.
Tú dices: Mi doctrina es pura, y yo soy limpio delante de tus ojos.
Sabes muy bien que yo no soy culpable y que nadie me puede salvar de tus manos.
Pero, ¡ay, si Dios hablase, si abriese los labios para responderte,
¿Quién puede sacar lo puro de lo impuro? Nadie.
¿Crees tal vez que afianzas tu derecho, que ante Dios afirmas tu justicia,
Tendría entonces al menos un consuelo, una efusión de gozo en mis males sin piedad; el no haber eludido los preceptos del santo.
Si he pecado, ¿qué te he hecho a ti con ello, oh guardián de los hombres? ¿Por qué me has hecho blanco tuyo? ¿Por qué te causo inquietud?
porque yo os doy una buena doctrina; no abandonéis mi enseñanza.
Glorificad en vuestros corazones a Cristo, el Señor, dispuestos siempre a contestar a todo el que os pida razón de vuestra esperanza;