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Jeremías 48:3 - Biblia Martin Nieto

Gritos salen de Joronáyim: ¡Devastación! ¡Ruina inmensa!

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Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¡Voz de clamor de Horonaim, destrucción y gran quebrantamiento!

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Oigan los gritos que vienen de Horonaim, gritos de devastación y gran destrucción.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Escuchen los gritos que se sienten desde Abarim: '¡Calamidad! ¡Desastre total! ¡Moab ha sido arrasada!'

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La Biblia Textual 3a Edicion

¡Voz de clamor desde Horonaim: Asolamiento y gran destrucción!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

¡Oid! Gritos desde Joronáin: devastación, desastre inmenso.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¡Voz de clamor desde Horonaim, despojo y gran destrucción!

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Jeremías 48:3
12 Tagairtí Cros  

Ha subido la gente de Dibón a las alturas a llorar; sobre el Nebo y Madaba gime Moab. Toda cabeza, calva; toda barba, cortada;


Mi corazón gime por Moab; sus fugitivos están ya en Soar, en Egla-Selisiyá. La subida de Lujit la suben llorando; por el camino de Joronáyim, lanzan gritos de angustia.


Los lamentos recorren el territorio de Moab: hasta Egláyim llega su grito; su aullido, hasta Beer- Elín.


Por esto digo: Retirad vuestros ojos de mí, dejad que llore amargamente; no tratéis de consolarme por la ruina de la hija de mi pueblo.


¡Sea ese hombre como las ciudades que el Señor destruyó sin compasión! ¡Oiga el grito de alarma por la mañana, el alarido de guerra al mediodía!


Esto dice el Señor: 'Suben aguas del norte; es un río desbordante que inunda el país y cuanto encierra, las ciudades y sus habitantes. Gritan los hombres, lanzan gemidos todos los habitantes del país,


Los gritos de Jesbón y de Elealé llegan hasta Yahas; se grita desde Soar hasta Joronáyim y Eglat Selisiya, pues también las aguas de Nimrín se convierten en un desierto.


¡Moab está aplastada!, se anuncia a gritos hasta en Segor.


¡Ay!, la cuesta de Lujit la suben llorando; ¡ay!, por la bajada de Joronáyim se oyen gritos de angustia.


¡Escuchad! Agudos gritos salen de Babilonia, un gran estrago del país de los caldeos.