A partir de éstos se hizo la repartición de las naciones en las islas: cada uno con su tierra según su lengua y su nación, según su familia.
Isaías 41:5 - Biblia Martin Nieto Las islas lo ven y se estremecen, tiemblan los confines de la tierra, se acercan y allí están. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Las costas vieron, y tuvieron temor; los confines de la tierra se espantaron; se congregaron, y vinieron. Biblia Nueva Traducción Viviente Las tierras más allá del mar observan con temor; las tierras lejanas tiemblan y se movilizan para la guerra. Biblia Católica (Latinoamericana) Las islas lo han visto y sienten miedo,
y se han asustado hasta los extremos del mundo. La Biblia Textual 3a Edicion Las tierras lejanas vieron esto y temieron, Temblaron los confines de la tierra, se congregaron, y vinieron. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Lo ven las islas y temen, tiemblan los confines de la tierra. Se acercaron y vinieron. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Las islas lo vieron, y tuvieron temor, los confines de la tierra se espantaron; se congregaron, y vinieron. |
A partir de éstos se hizo la repartición de las naciones en las islas: cada uno con su tierra según su lengua y su nación, según su familia.
tú, que acallas el estruendo de los mares, el bramar de sus olas y el tumulto de los pueblos.
Ante tus prodigios tiemblan todos los habitantes de la tierra, tú llenas de alegría las regiones de oriente y occidente.
decid a Dios: 'Tus obras son maravillosas'. Por la grandeza de tu poder tus enemigos ante ti se rinden;
Al oírlo temblaron los pueblos; se apoderó de los filisteos el terror.
Islas, guardad silencio ante mí; renovad, pueblos, vuestras fuerzas. Adelantaos para hablar, comparezcamos juntos en juicio.
Ahora se estremecen las islas, el día de tu caída, las islas del mar se aterran de tu fin.
porque hemos oído cómo el Señor secó las aguas del mar Rojo ante vosotros cuando salíais de Egipto y cómo habéis tratado a los reyes amorreos de Transjordania, a Sijón y a Og, a quienes exterminasteis.
Cuando los reyes amorreos de Cisjordania y los cananeos de occidente oyeron cómo había secado el Señor las aguas del Jordán ante los israelitas hasta que pasaron, se quedaron atónitos y acobardados ante ellos.