Yo voy a enviar sobre la tierra un diluvio de aguas para destruir a todo ser viviente que hay bajo el cielo. Todo cuanto hay sobre la tierra morirá.
Isaías 27:3 - Biblia Martin Nieto Yo, el Señor, soy su guardián; en todo instante la riego para que no caiga su follaje; de día y de noche la guardo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Yo Jehová la guardo, cada momento la regaré; la guardaré de noche y de día, para que nadie la dañe. Biblia Nueva Traducción Viviente Yo, el Señor, lo vigilaré, y lo regaré con cuidado. Día y noche lo vigilaré para que nadie pueda hacerle daño. Biblia Católica (Latinoamericana) Yo, Yavé, soy su cuidador; la riego todas las mañanas para que no caiga su follaje, y me preocupo por ella noche y día. La Biblia Textual 3a Edicion Yo, YHVH, soy su guardián, La riego en todo momento Para que nadie la dañe, La guardo noche y día. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yo, Yahveh, soy su guardián, a cada instante la riego; para que nadie la dañe noche y día la guardo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Yo Jehová la guardo, cada momento la regaré; la guardaré de noche y de día, para que nadie la dañe. |
Yo voy a enviar sobre la tierra un diluvio de aguas para destruir a todo ser viviente que hay bajo el cielo. Todo cuanto hay sobre la tierra morirá.
'Yo establezco mi pacto con vosotros, con vuestros descendientes después de vosotros
Que estas palabras con que he suplicado al Señor estén presentes ante él día y noche, a fin de que en todo tiempo defienda la causa de su siervo y de su pueblo Israel,
Dejad las armas, reconoced que yo soy Dios, por encima de las naciones, por encima de la tierra.
Un río y sus canales alegran la ciudad de Dios, la más santa morada del altísimo.
Como pájaros que vuelan, así el Señor omnipotente protegerá a Jerusalén: la protegerá, la salvará, la perdonará, la liberará.
Yo, el Señor, te he llamado para la justicia, te he tomado de la mano y te he formado, te he puesto como alianza del pueblo y luz de las naciones,
porque yo derramaré agua en el suelo sediento, y torrentes en la tierra reseca: infundiré mi espíritu en tu raza y mi bendición en tu posteridad.
Hasta vuestra ancianidad yo seré el mismo, os sostendré hasta vuestra vejez. Lo he hecho hasta aquí, os he llevado, y os sostendré, os salvaré.
Acordaos de lo pasado desde antiguo, que yo soy Dios y no existe ningún otro dios y nadie igual a mí.
Esto dice el Señor: En el tiempo de la gracia te he atendido, el día de la salvación te he ayudado, te he formado y te he puesto como alianza del pueblo para reconstruir el país, para repartir heredades devastadas
Haré de ella un desierto; no será más podada ni escardada; toda será cardos y abrojos; y mandaré a las nubes que no dejen caer más lluvia sobre ella.
El Señor será tu guía siempre, en los desiertos saciará tu hambre, a tus huesos infundirá vigor, y tú serás como un huerto regado, cual manantial de agua, de caudal inagotable.
Y mamarás la leche de los pueblos, las riquezas de los reyes chuparás; y sabrás que yo, el Señor, soy tu salvador, tu libertador, el fuerte de Jacob.
Pues esto dice el Señor Dios: Yo mismo cuidaré de mi ganado y le pasaré revista.
Yo, el Señor, seré su Dios, y mi siervo David será príncipe en medio de ellos: Yo, el Señor, he hablado.
Infundiré en vosotros mi espíritu y reviviréis; os estableceré en vuestro suelo y sabréis que yo, el Señor, lo digo y lo hago', dice el Señor.
Y sabrán las gentes que yo, el Señor, consagro a Israel, cuando mi santuario esté en medio de ellos por siempre'.
Él guarda los pasos de sus fieles, mientras que los malvados perecerán en las tinieblas, pues no es por la fuerza como vence el hombre.