Aquel día el Señor visitará a las milicias del cielo allá en lo alto; y aquí abajo, a los reyes de la tierra.
Isaías 24:4 - Biblia Martin Nieto La tierra está de luto, maldita; mustio y marchito el universo, cielo y tierra marchitos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la tierra. Biblia Nueva Traducción Viviente La tierra está de duelo y se seca, y el suelo se consume y se marchita; hasta los mejores habitantes de la tierra se consumen. Biblia Católica (Latinoamericana) La tierra está de duelo y se seca,
el mundo está agotado y decae,
el cielo y la tierra se debilitan. La Biblia Textual 3a Edicion De duelo está la tierra, se reseca; Languidece el universo, se marchita; Los encumbrados° de la tierra desfallecen. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se entristece, languidece la tierra, desfallece, languidece el orbe, desfallecen el cielo y el suelo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Se enlutó, se marchitó la tierra; el mundo languidece y se marchita; languidecen los grandes de los pueblos de la tierra. |
Aquel día el Señor visitará a las milicias del cielo allá en lo alto; y aquí abajo, a los reyes de la tierra.
Devastada será, devastada la tierra, totalmente saqueada, porque el Señor así lo ha decretado.
¡Ay de la soberbia corona de los borrachos de Efraín, y de la flor marchita de orgulloso esplendor que domina el fértil valle; ay de los cargados de vino!
Llanto y lamento habrá en tus puertas, y yacerás desolada en el polvo.
La tierra está de luto, languidece; avergonzado el Líbano, se amustia; el Sarón se parece a nuestra estepa, el Basán y el Carmelo están pelados.
No hubo nadie que invocara tu nombre, que despertara para apoyarse en ti, pues tú habías escondido tu rostro de nosotros y nos habías dejado a merced de nuestras iniquidades.
¿Hasta cuándo estará de luto la tierra, y reseca la hierba de todo el campo? Por la maldad de los habitantes perecen bestias y aves, porque dicen: '¡Dios no ve nuestros caminos!'.
Por eso la tierra se pondrá de luto, y los cielos en lo alto se oscurecerán. Porque he hablado y no me arrepentiré; lo he resuelto y no me volveré atrás.
Los caminos de Sión están en duelo, pues nadie ya viene a sus fiestas; todas sus puertas asoladas, gimiendo sus sacerdotes, sus doncellas en pena, toda, ay, repleta de amargura.
Por eso el país está de luto y todos sus habitantes desfallecen; hasta las bestias de los campos, las aves del cielo y los peces del mar desaparecen.
Devastado está el campo, en duelo está la tierra, el trigo ha sido asolado, ha faltado el mosto y se ha agotado el aceite.