que nuestros bueyes vengan bien cargados, que no haya brechas ni fugas, ni gritos de alarma en nuestras plazas.
Isaías 24:11 - Biblia Martin Nieto Gritos hay por las calles por la falta de vino, ha desaparecido toda alegría, ha huido del país el júbilo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Hay clamores por falta de vino en las calles; todo gozo se oscureció, se desterró la alegría de la tierra. Biblia Nueva Traducción Viviente Se reúnen las turbas en las calles, clamando por vino; el gozo se ha convertido en tristeza y la alegría ha sido expulsada de la tierra. Biblia Católica (Latinoamericana) La gente se queja en las calles porque no hay vino,
la alegría ya no se ve
y las fiestas han desaparecido del país. La Biblia Textual 3a Edicion Hay lamentos en las plazas por la falta de vino. Todo gozo se ha ensombrecido, La alegría se ha ido de la tierra. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Claman por el vino en las calles, todo contento está ensombrecido, ha emigrado la alegría de la tierra. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Hay clamor por vino en las calles; todo gozo se apagó, se desterró la alegría de la tierra. |
que nuestros bueyes vengan bien cargados, que no haya brechas ni fugas, ni gritos de alarma en nuestras plazas.
Dad los licores al que va a perecer, el vino al corazón lleno de amargura.
La alegría y el júbilo han huido de los huertos; ya no hay en las viñas alborozo ni clamores de fiesta; ya no se pisa el vino en el lagar, ha enmudecido el canto.
Dentro de un año y unos días temblaréis, ¡oh confiadas!, porque se habrá acabado la vendimia y no habrá más recolección.
por el terruño de mi pueblo, donde brotan abrojos y espinas; por todas las casas jubilosas de la ciudad alegre.
mirará hacia la tierra, y sólo habrá angustia, oscuridad, desolación y tinieblas, espesa lobreguez. Mas no (por siempre) las tinieblas sobre el que está en angustia.
Se muerde a la derecha, y aún se tiene hambre; se come a la izquierda, y no se sacian; todos devoran la carne de su prójimo.
Judá está de luto, sus ciudades languidecen, yacen postradas en tierra y un grito de angustia sale de Jerusalén.
Conocen las naciones tu derrota, la tierra está llena de tus gritos. El guerrero tropieza con el guerrero, caen los dos a la vez.
Han desaparecido el gozo y la alegría del viñedo y de la campiña de Moab; he hecho que falte el vino en las cubas, el pisador no pisa ya, ni resuenan los cantos de alegría.
Y no claman a mí en su corazón cuando se lamentan en sus camas; se preocupan del trigo y del vino y se rebelan contra mí.
Se ha secado el viñedo, se ha agostado la higuera, el granado, la palmera, el manzano, todos los árboles del campo están secos. ¡Ha desaparecido la alegría entre los hombres!
¡Ay, qué día; cercano está el día del Señor; que viene como devastación del todopoderoso!
Abrahán repuso: Hijo, acuérdate que ya recibiste tus bienes durante la vida, y Lázaro, por el contrario, males. Ahora él está aquí consolado, y tú eres atormentado.