Por su parte, decían nuestros enemigos: 'Sin que se enteren ni se den cuenta, caeremos sobre ellos, los mataremos y así pondremos fin a la obra'.
Isaías 2:9 - Biblia Martin Nieto Será el hombre humillado, el mortal abatido. ¡No los perdones! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y se ha inclinado el hombre, y el varón se ha humillado; por tanto, no los perdones. Biblia Nueva Traducción Viviente Por eso ahora serán humillados, y todos serán rebajados; no los perdones. Biblia Católica (Latinoamericana) El hombre será humillado, el mortal abatido:
¡No se lo perdones! La Biblia Textual 3a Edicion ¡Así se ha postrado el hombre! ¡Así se ha rebajado el humano! Por tanto no los perdones. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Será abatido el hombre, el mortal será humillado. ¡No los perdones! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el hombre vil se ha inclinado, y el hombre altivo se ha humillado; por tanto, no los perdones. |
Por su parte, decían nuestros enemigos: 'Sin que se enteren ni se den cuenta, caeremos sobre ellos, los mataremos y así pondremos fin a la obra'.
sin culpa mía, corren y se lanzan. Despiértate, ven a mi encuentro y mira;
Cuando los ramos están secos, se les rompe; vienen las mujeres y los queman. Por ser un pueblo sin inteligencia no se compadece de él su creador, no le da su favor el que le ha formado.
Será doblegado el mortal, será humillado el hombre, y los ojos de los soberbios, abatidos.
Pero el Señor omnipotente será exaltado al juzgar; el Dios santo su santidad mostrará al hacer justicia.
Te has ungido con óleo en honor de Moloc, has prodigado tus perfumes; has enviado a tus mensajeros a lo lejos, los has hecho bajar hasta el abismo.
Pero tú, Señor, conoces bien sus planes asesinos contra mí. No perdones su crimen, no borres de tu vista su pecado. ¡Caigan derribados ante ti, actúa contra ellos en el día de tu cólera!
pero quien blasfeme contra el Espíritu Santo no tendrá perdón jamás y cargará con su pecado eternamente'.
Que nadie, con simulada humildad o culto de ángeles, os niegue el premio de la victoria, metiéndose en cosas que no ha visto, presumiendo vanamente a la luz de su inteligencia carnal,
Estas cosas pueden tener un aspecto de sabiduría, porque manifiestan cierta religiosidad, cierta humildad y un desprecio por el cuerpo; pero, en realidad, no tienen valor alguno, pues sólo tienden a satisfacer los apetitos carnales.
Josué dijo al pueblo: 'Vosotros no podréis servir al Señor, porque él es un Dios santo, un Dios celoso, y no soportará vuestros delitos ni vuestros pecados.