Derrotó también a los moabitas, los hizo echarse a tierra y los midió con la cuerda. Condenó a muerte dos medidas de cuerda y dejó con vida una medida completa. Los moabitas quedaron sometidos a David y le pagaron tributo.
Isaías 16:1 - Biblia Martin Nieto Enviad el cordero al soberano de la tierra; desde Sela, a través del desierto, al monte de la hija de Sión. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Enviad cordero al señor de la tierra, desde Sela del desierto al monte de la hija de Sion. Biblia Nueva Traducción Viviente Envíen corderos de Sela como tributo al gobernante de la tierra. Envíenlos a través del desierto hasta el monte de la hermosa Sion. Biblia Católica (Latinoamericana) Desde Sela que está en el desierto,
lleven corderos al monte de la hija de Sión
al soberano del país. La Biblia Textual 3a Edicion Enviad el cordero° al soberano de la tierra, Desde Petra,° por el desierto, Al Monte de la hija de Sión. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Enviad corderos al señor del país desde la Roca, por el desierto, al monte de la hija de Sión. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Enviad cordero al gobernador de la tierra, desde Sela hasta el desierto, hasta el monte de la hija de Sión. |
Derrotó también a los moabitas, los hizo echarse a tierra y los midió con la cuerda. Condenó a muerte dos medidas de cuerda y dejó con vida una medida completa. Los moabitas quedaron sometidos a David y le pagaron tributo.
Él derrotó a Edón en el valle de la Sal, diez mil hombres en conjunto: tomó por asalto Selá, y le puso por nombre Yocteel, que conserva hasta el presente.
Mesa, rey de Moab, era pastor, y pagaba en tributo al rey de Israel cien mil corderos y cien mil carneros de lana.
Con este dinero comprarás novillos y corderos con las correspondientes ofrendas de pan y de vino para ofrecerlo luego en el altar del templo de vuestro Dios, en Jerusalén.
Hoy mismo estará en Nob; alzará ya su mano contra el monte de la hija de Sión, contra la colina de Jerusalén.
Alcen su voz el desierto y sus ciudades, las aldeas en que habita Quedar; aclamen los habitantes de Petra, desde lo alto de los montes lancen gritos.
Toda la población del país estará obligada a presentar tal ofrenda al príncipe de Israel.
Y tú, Torre del Rebaño, Fortaleza de la hija de Sión, a ti vendrá el antiguo poder, el reino de la hija de Jerusalén.