Cuando salió, no podía hablarles, por lo que comprendieron que había tenido alguna visión en el santuario. Él les hacía señas y permaneció mudo.
Hechos 19:33 - Biblia Martin Nieto Algunos judíos empujaron a Alejandro para que hablara a la gente, y Alejandro hizo señal con la mano de que quería hablar al pueblo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y sacaron de entre la multitud a Alejandro, empujándole los judíos. Entonces Alejandro, pedido silencio con la mano, quería hablar en su defensa ante el pueblo. Biblia Nueva Traducción Viviente Los judíos de la multitud empujaron a Alejandro hacia adelante y le dijeron que explicara la situación. Él hizo señas para pedir silencio e intentó hablar; Biblia Católica (Latinoamericana) En cierto momento algunos hicieron salir de entre la gente a un tal Alejandro, a quien los judíos empujaban adelante. Quería justificarlos ante el pueblo y pidió silencio con la mano. La Biblia Textual 3a Edicion Y de entre la multitud instruyeron a Alejandro,° empujándolo los judíos. Entonces Alejandro, haciendo señal de silencio con la mano, quería hacer su defensa ante el pueblo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 De entre el gentío destacaron a un tal Alejandro, al que empujaban los judíos. Alejandro, pues, reclamando atención con la mano, intentaba defenderse ante el pueblo; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sacaron de entre la multitud a Alejandro, empujándole los judíos. Entonces Alejandro, haciendo señal con la mano, quería hablar en su defensa ante el pueblo. |
Cuando salió, no podía hablarles, por lo que comprendieron que había tenido alguna visión en el santuario. Él les hacía señas y permaneció mudo.
Pedro les hizo señas con la mano de que callasen y contó cómo el Señor lo había sacado de la cárcel. Y añadió: 'Comunicádselo a Santiago y a los hermanos'. Luego salió y se fue a otro sitio.
Pablo se levantó y, haciendo con la mano señal de silencio, dijo: 'Israelitas y los que sois fieles a Dios, escuchad.
Pero cuando se dieron cuenta de que era judío, todos a una gritaron por espacio de casi dos horas: '¡Grande es la Diana de los efesios!'.
El comandante se lo permitió. Pablo, puesto en pie sobre las escaleras, hizo ademán al pueblo con la mano, y se hizo un gran silencio. Entonces habló en lengua hebrea:
Pablo, después de darle el gobernador la señal de hablar, respondió: 'Como sé que desde hace muchos años eres el juez de esta nación, haré confiadamente mi defensa.
Es justo que yo sienta así de todos vosotros, pues os llevo en el corazón, ya que compartís conmigo el privilegio de estar preso y de defender y consolidar el evangelio.
entre los que se encuentran Himeneo y Alejandro, a quienes entregué a Satanás para que aprendan a no blasfemar.
Alejandro, el herrero, me ha hecho mucho daño; el Señor le dará su merecido.