Había también unas mujeres mirando desde lejos. Entre ellas María Magdalena, María la madre de Santiago el menor y de José, y Salomé,
Hechos 15:13 - Biblia Martin Nieto Cuando ellos terminaron, intervino Santiago: 'Hermanos, escuchadme. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y cuando ellos callaron, Jacobo respondió diciendo: Varones hermanos, oídme. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando terminaron, Santiago se puso de pie y dijo: «Hermanos, escúchenme. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando terminaron de hablar, Santiago tomó la palabra y dijo: 'Hermanos, escúchenme:' La Biblia Textual 3a Edicion Cuando terminaron de hablar, Jacobo tomó la palabra y dijo: Varones hermanos, oídme: Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando acabaron su informe, tomó la palabra Santiago y dijo: 'Oídme, hermanos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y después que hubieron callado, Jacobo respondió, diciendo: Varones hermanos, oídme. |
Había también unas mujeres mirando desde lejos. Entre ellas María Magdalena, María la madre de Santiago el menor y de José, y Salomé,
Pedro les hizo señas con la mano de que callasen y contó cómo el Señor lo había sacado de la cárcel. Y añadió: 'Comunicádselo a Santiago y a los hermanos'. Luego salió y se fue a otro sitio.
Simón ha contado cómo Dios dispuso desde el principio escoger de entre los paganos un pueblo consagrado a su nombre.
Entonces Pedro, en pie con los once, les dirigió en voz alta estas palabras: 'Judíos y habitantes todos de Jerusalén: percataos bien de esto y prestad atención a mis palabras.
Israelitas, escuchadme: Dios acreditó ante vosotros a Jesús el Nazareno con los milagros, prodigios y señales que hizo por medio de él, como bien sabéis.
Hermanos, hablemos con franqueza. El patriarca David murió y fue sepultado, y su sepulcro subsiste entre nosotros hasta el día de hoy.
Al día siguiente Pablo fue con nosotros a casa de Santiago, donde se reunieron todos los presbíteros.
Y él dijo: 'Hermanos y padres, escuchad: El Dios de la gloria se apareció a nuestro padre Abrahán cuando estaba en Mesopotamia, antes de vivir en Jarán,
Y no vi a ningún otro apóstol fuera de Santiago, el hermano del Señor.
Pues antes de que viniesen algunos de parte de Santiago, él comía con los paganos; pero cuando vinieron, se retrajo y se apartó por miedo a los judíos;
y Santiago, Pedro y Juan, que eran considerados como columnas, reconocieron que Dios me ha dado este privilegio, y nos dieron la mano a mí y a Bernabé en señal de que estaban de acuerdo en que nosotros nos dedicáramos a los paganos
Santiago, siervo de Dios y de Jesucristo el Señor, a las doce tribus dispersas por el mundo, salud.
Mis queridos hermanos, sabed que todo hombre debe ser pronto para escuchar, pero lento para hablar y para airarse;