Habacuc 1:16 - Biblia Martin Nieto Por eso ofrece sacrificios a su red e incienso a su copo: porque gracias a ellos su pesca es abundante, y suculenta su comida. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por esto hará sacrificios a su red, y ofrecerá sahumerios a sus mallas; porque con ellas engordó su porción, y engrasó su comida. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces adorarán a sus redes y quemarán incienso frente a ellas. «¡Estas redes son los dioses que nos han hecho ricos!», exclamarán. Biblia Católica (Latinoamericana) Feliz y contento por su pesca, le ofrece sacrificios a su red, quema incienso a sus mallas, pues a ellas les debe que haya pescado tanto y tenga que comer en abundancia. La Biblia Textual 3a Edicion Por eso sacrifican a su red y ofrendan a su barredera, porque por ellas su porción es abundante y suculenta su comida. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ofrece sacrificios a su red quema incienso a su nasa, pues por ellas es pingüe su porción y suculenta su comida. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por esto hará sacrificios a su red, y quemará incienso a sus mallas; porque con ellos engordó su porción, y engrasó su comida. |
Por medio de tus esbirros has insultado al Señor, has dicho: Con mis innumerables carros he subido a la cima de los montes, hasta las cumbres últimas del Líbano; he talado sus altísimos cedros y sus más imponentes cipreses; he llegado hasta sus últimos rincones, hasta la espesura de su bosque.
sino que haremos decididamente todo lo que nos hemos propuesto: quemar incienso y hacer ofrendas de vino a la reina del cielo, tal como hemos hecho nosotros y como hicieron nuestros padres, nuestros reyes y nuestros príncipes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén. Entonces tuvimos pan hasta hartarnos, éramos felices y no veíamos desventuras.
porque me irritáis con las obras de vuestras manos, quemando incienso a dioses extraños en Egipto, adonde habéis venido a vivir, fraguando así vuestro exterminio y convirtiéndoos en maldición y oprobio ante todas las naciones de la tierra.
Diles: Esto dice el Señor Dios: Aquí estoy contra ti, Faraón, rey de Egipto, cocodrilo gigante, recostado en medio de tus ríos, tú que has dicho: Mis Nilos son míos, yo me los he hecho.
La sentencia contra Nabucodonosor se ejecutó inmediatamente: fue expulsado de la sociedad humana, comenzó a comer hierba como los bueyes y su cuerpo fue bañado por el rocío del cielo hasta que sus cabellos llegaron a crecerle como las plumas del águila y las uñas como las de las aves.
más aún, te has levantado contra el Señor del cielo: has mandado traer las copas de su templo, y tú, tus dignatarios, tus mujeres y tus concubinas habéis bebido vino en ellas. Has celebrado a los dioses de oro y plata, de bronce, hierro, madera y piedra, que no ven, ni oyen, ni entienden, pero no has glorificado al Dios que tiene en sus manos tu propio aliento y todos tus caminos.
Luego cambia el viento y desaparecen; criminales, cuya fuerza es su dios.
Guárdate de decir en tu corazón: Mi fuerza y el poder de mis manos han hecho todo esto.