Y con la vergüenza de su prostitución ha profanado la tierra; ha cometido adulterio con la piedra y con el leño.
Ezequiel 23:3 - Biblia Martin Nieto Se prostituyeron en Egipto desde su juventud. Allí palparon su pecho y acariciaron su seno virginal. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 las cuales fornicaron en Egipto; en su juventud fornicaron. Allí fueron apretados sus pechos, allí fueron estrujados sus pechos virginales. Biblia Nueva Traducción Viviente Ambas se hicieron prostitutas en Egipto. Incluso cuando eran jovencitas, dejaban que los hombres manosearan sus senos. Biblia Católica (Latinoamericana) Desde su juventud en Egipto empezaron a prostituirse, metían mano en sus senos y acariciaban su pecho de muchachas. La Biblia Textual 3a Edicion Y se prostituyeron en Egipto: En su juventud fornicaron. Allí se dejaron apretujar los pechos, Allí acariciaron sus pezones virginales. Biblia Serafín de Ausejo 1975 que se prostituyeron en Egipto; se prostituyeron en su juventud; allí fueron palpados sus pechos, allí fueron manoseados sus senos virginales. Biblia Reina Valera Gómez (2023) las cuales se prostituyeron en Egipto; en su juventud se prostituyeron. Allí fueron apretados sus pechos, y allí fueron estrujados los pechos de su virginidad. |
Y con la vergüenza de su prostitución ha profanado la tierra; ha cometido adulterio con la piedra y con el leño.
Pero tú, confiada en tu belleza y valiéndote de tu fama, te metiste a prostituta y te ofreciste a todo el que pasaba, entregándote a él;
Y entre todas tus prácticas detestables y tus prostituciones no te acordaste de los días de tu infancia, cuando estabas desnuda y descubierta, agitándote en tu sangre.
Y les dije: Tirad los ídolos que seducen vuestros ojos y no os contaminéis con los ídolos de Egipto: Yo soy el Señor, vuestro Dios.
Mas ellos se rebelaron contra mí y no quisieron escucharme. No tiraron los ídolos que seducían sus ojos ni abandonaron los ídolos de Egipto.
Ella multiplicó sus prostituciones, recordando los días de su juventud, cuando se prostituía en Egipto
Renovaste así la infamia de tu juventud, cuando los egipcios palpaban tu pecho y acariciaban tu seno virginal.
La beberás, la apurarás, roerás incluso sus cascotes, que te desgarrarán el seno. He hablado yo, dice el Señor Dios.
Sus nombres eran: Oholá, la mayor, y Oholibá, su hermana. Fueron mías, y dieron a luz hijos e hijas. Sus nombres correspondían: Oholá a Samaría, Oholibá a Jerusalén.
Yo dije entonces sobre la ciudad consumida por la disolución: ¿También ella continuará ahora cometiendo sus detestables acciones?
Ni renegó de sus prostituciones de Egipto, donde se habían acostado con ella, en su juventud, acariciando sus pechos virginales y derramando en ella su impureza.
Así comienzan las palabras que el Señor dijo a Oseas: 'Anda, toma por mujer una prostituta y engendra hijos de prostitución, porque el país no hace más que prostituirse, alejándose del Señor'.
Le haré rendir cuentas de sus fiestas en honor de los baales, a quienes quemaba incienso ataviada de anillos y collares para correr tras sus amantes, olvidándose de mí -dice el Señor-.
No ofrecerá más sus sacrificios a los sátiros, ante los que solían prostituirse; ésta será ley perpetua para ellos y para sus descendientes.
Ya habéis visto sus horrorosos y vergonzosos ídolos de madera, piedra, plata y oro.
Respetad al Señor y servidle con perfección y fidelidad, alejad los dioses a los que sirvieron vuestros padres al otro lado del río y en Egipto, y servid al Señor.
Su cadáver quedará tendido en la plaza de la gran ciudad, que simbólicamente se llama Sodoma y Egipto (donde también ha sido crucificado su Señor).