Tenemos que llevar también nuestro ganado; no ha de quedar ni una res, porque hemos de tomar de él para ofrecerlo al Señor, nuestro Dios, y no sabemos qué hemos de ofrecer al Señor hasta que lleguemos allá'.
Éxodo 8:27 - Biblia Martin Nieto El Señor hizo según la palabra de Moisés, y se alejaron los tábanos del Faraón, de sus servidores y de su pueblo. No quedó ni siquiera uno. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Camino de tres días iremos por el desierto, y ofreceremos sacrificios a Jehová nuestro Dios, como él nos dirá. Biblia Nueva Traducción Viviente Para ofrecer sacrificios al Señor nuestro Dios, tenemos que salir al desierto, a una distancia de tres días, tal como él nos ordenó. Biblia Católica (Latinoamericana) y Yavé cumplió la promesa de Moisés: liberó de los tábanos a Faraón, a sus servidores y su pueblo, sin que quedara uno solo. La Biblia Textual 3a Edicion Iremos camino de tres jornadas por el desierto y haremos sacrificio a YHVH nuestro Dios, conforme Él nos diga. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh escuchó la súplica de Moisés: los tábanos se alejaron del Faraón, de sus servidores y de su pueblo, sin quedar ni uno. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Camino de tres días iremos por el desierto, y ofreceremos sacrificios a Jehová nuestro Dios, como Él nos dirá. |
Tenemos que llevar también nuestro ganado; no ha de quedar ni una res, porque hemos de tomar de él para ofrecerlo al Señor, nuestro Dios, y no sabemos qué hemos de ofrecer al Señor hasta que lleguemos allá'.
Dios le dijo: 'Yo estaré contigo, y ésta será la señal de que yo te he enviado: cuando hayas sacado al pueblo de Egipto, adoraréis a Dios sobre este monte'.
Ellos escucharán tu voz. Tú con los ancianos de Israel irás al rey de Egipto y le diréis: El Señor, Dios de los hebreos, se nos ha aparecido; déjanos ir a tres días de camino por el desierto para ofrecer sacrificios al Señor nuestro Dios.
Mira bien lo que hoy te mando: voy a echar delante de ti al amorreo, al cananeo, al hitita, al fereceo, al heveo y al jebuseo.
Después de esto, Moisés y Aarón se presentaron ante el Faraón y le dijeron: 'Esto dice el Señor, Dios de Israel: Deja ir a mi pueblo para que celebre una fiesta en el desierto'.
Ellos le dijeron: 'El Dios de los hebreos se nos ha aparecido. Deja que vayamos al desierto, a tres jornadas de camino, para ofrecer sacrificios al Señor, nuestro Dios, no sea que nos castigue con peste o espada'.
Los hijos de Aarón, Nadab y Abihú, tomaron cada uno su incensario, pusieron fuego en él, echaron encima el incienso y ofrecieron ante el Señor un fuego profano que él no les había ordenado.
y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado. Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo'.