Una campanilla de oro y una granada, una campanilla de oro y una granada, y así sucesivamente en la orla del manto, todo alrededor.
Éxodo 28:35 - Biblia Martin Nieto Lo llevará Aarón al oficiar, para que se oiga el sonido cuando entre y salga del santuario del Señor, y no muera. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y estará sobre Aarón cuando ministre; y se oirá su sonido cuando él entre en el santuario delante de Jehová y cuando salga, para que no muera. Biblia Nueva Traducción Viviente Aarón llevará puesto el manto cada vez que oficie delante del Señor, y las campanillas sonarán cuando entre a la presencia del Señor, en el Lugar Santo, y también cuando salga de allí. Si lleva puesto el manto, no morirá. Biblia Católica (Latinoamericana) Aarón vestirá dicho manto cuando desempeñe su ministerio, y se oirá el sonido de las campanillas cuando entre al santuario para presentarse delante de Yavé, y también cuando salga del santuario; de lo contrario moriría. La Biblia Textual 3a Edicion Estará sobre Aarón cuando ministre, y así se oirá su sonido cuando él entre en el Santuario en presencia de YHVH, y cuando salga, para que no muera. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Aarón lo llevará puesto cuando oficie, para que cuando entre en el santuario, a la presencia de Yahveh, y cuando salga, se oiga el tintineo de las campanillas. Así no morirá'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y estará sobre Aarón cuando ministrare; y se oirá su sonido cuando él entrare en el santuario delante de Jehová, y cuando saliere, para que no muera. |
Una campanilla de oro y una granada, una campanilla de oro y una granada, y así sucesivamente en la orla del manto, todo alrededor.
Harás una lámina de oro puro, sobre la cual grabarás como se graban los sellos: 'Consagrado al Señor'.
y le dijo: 'Di a tu hermano Aarón que no podrá entrar nunca en el santuario, en el recinto que hay detrás del velo, en presencia del propiciatorio que está sobre el arca, no sea que muera cuando yo aparezca sobre el propiciatorio en una nube.
y entró de una vez para siempre en el santuario, no con sangre de machos cabríos y de becerros, sino con su propia sangre, adquiriéndonos una liberación eterna.