que me granjeó el favor del rey, de sus consejeros y de todos los funcionarios reales más influyentes! Así yo, animado por la ayuda del Señor, mi Dios, convoqué a los israelitas más importantes para que vinieran conmigo.
Esdras 7:9 - Biblia Martin Nieto Salió de Babilonia el día uno del primer mes, y el día uno del quinto mes, con la ayuda de Dios, llegó a Jerusalén, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Porque el día primero del primer mes fue el principio de la partida de Babilonia, y al primero del mes quinto llegó a Jerusalén, estando con él la buena mano de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Había hecho arreglos para partir de Babilonia el 8 de abril, el primer día del nuevo año, y llegó a Jerusalén el 4 de agosto, pues la bondadosa mano de su Dios estaba sobre él. Biblia Católica (Latinoamericana) Había iniciado su salida de Babilonia el día primero del primer mes, y llegó a Jerusalén el día primero del quinto mes con la ayuda de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Porque el primero del mes primero había sido el inicio del retorno° de Babilonia, y al primero del mes quinto llegó a Jerusalem, según la bondadosa mano de su Dios sobre él. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se había puesto en camino desde Babilonia el día primero del mes primero, y entró en Jerusalén el día primero del mes quinto. La mano bondadosa de su Dios estaba con él, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque el día primero del primer mes fue el principio de la partida de Babilonia, y al primero del mes quinto llegó a Jerusalén, según la buena mano de su Dios sobre él. |
que me granjeó el favor del rey, de sus consejeros y de todos los funcionarios reales más influyentes! Así yo, animado por la ayuda del Señor, mi Dios, convoqué a los israelitas más importantes para que vinieran conmigo.
volvió de Babilonia. Era un escriba experto en la ley de Moisés, dada por el Señor, Dios de Israel. El rey le concedió todo lo que deseaba, porque el Señor, su Dios, estaba con él.
Y gracias a la ayuda bondadosa de nuestro Dios, nos trajeron a Serebías, un hombre prudente, descendiente de Majlí, de Leví, de Israel, con sus hijos y hermanos: dieciocho personas en total;
Pues me había avergonzado de solicitar del rey tropa y gente de a caballo para protegernos de eventuales enemigos durante el viaje, después de haber hablado al rey en estos términos: 'La mano de nuestro Dios se extiende para bendecir a todos los que lo buscan; su poder y su furor caen sobre todos los que lo abandonan'.
Por fin partimos del río Ahavá hacia Jerusalén el día doce del primer mes; nuestro Dios nos protegió durante el viaje, y nos libró de toda violencia de enemigos y saqueadores.
Y les conté cómo Dios me había protegido y las palabras que el rey me había dirigido. Ellos exclamaron: '¡Ea, emprendamos la construcción!'. Y se animaron mutuamente para esta hermosa tarea.
y una carta dirigida a Asaf, el guarda del parque real, para que me dé madera de construcción para las puertas de la ciudadela del templo, para la muralla de la ciudad y la casa en que he de habitar yo'. El rey me lo concedió, porque mi Dios me protegía.
Pon tu mano sobre el hombre de tu diestra, sobre el hijo del hombre que tú has fortalecido,
Cuando veáis esto, vuestro corazón se alegrará y vuestros huesos reverdecerán como la hierba. Sí, la mano del Señor se dará a conocer a sus siervos y su cólera a sus enemigos.