Este rey actuará a placer; se hará orgulloso hasta engreírse por encima de toda divinidad; dirá cosas monstruosas contra el Dios de los dioses y prosperará hasta que se haya agotado la cólera, porque lo que está decidido se cumplirá.
2 Tesalonicenses 2:3 - Biblia Martin Nieto Que nadie os engañe en modo alguno, porque antes ha de venir la apostasía y ha de aparecer el hombre de la iniquidad, el destinado a la perdición, el adversario, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, Biblia Nueva Traducción Viviente No se dejen engañar por lo que dicen. Pues aquel día no vendrá hasta que haya una gran rebelión contra Dios y se dé a conocer el hombre de anarquía, aquel que trae destrucción. Biblia Católica (Latinoamericana) No se dejen engañar de ninguna manera. Primero tiene que producirse la apostasía y aparecer el adversario de la religión, el instrumento de la perdición, La Biblia Textual 3a Edicion ¡Nadie os engañe en ninguna manera!, porque no sucederá° sin que antes° venga la apostasía, y sea manifestado el hombre de iniquidad,° el hijo de perdición, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Que nadie os engañe en modo alguno. Porque si primero no viene la apostasía y aparece el hombre impío, el hijo de la perdición, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y sea revelado el hombre de pecado, el hijo de perdición, |
Este rey actuará a placer; se hará orgulloso hasta engreírse por encima de toda divinidad; dirá cosas monstruosas contra el Dios de los dioses y prosperará hasta que se haya agotado la cólera, porque lo que está decidido se cumplirá.
Proferirá palabras monstruosas contra el altísimo, perseguirá a los santos del altísimo y tratará de cambiar festividades y leyes. El pueblo santo será entregado en su poder por un tiempo, dos tiempos y medio tiempo.
Gracias a su astucia, la traición tendrá éxito en sus manos, su corazón se inflará de soberbia y de improviso destruirá a una gran multitud. Se alzará también contra el príncipe de los príncipes. Pero será destruido sin intervención humana.
Cuando yo estaba con ellos, yo los guardaba y los protegía con tu poder; tú me los confiaste, y ninguno se perdió, a no ser el que tenía que perderse para que se cumpliera la Escritura.
¿Es que no sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No os engañéis; ni los lujuriosos, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los invertidos,
Que nadie os engañe con vanas palabras, pues por estas cosas vendrá la ira de Dios sobre los rebeldes.
Hijos míos, estamos en la última hora, y, como habéis oído, el anticristo viene; y ahora ya han surgido muchos anticristos; por eso conocemos que es la última hora.
y el que no confiesa a Jesús no es de Dios, sino del anticristo, del cual habéis oído decir que estaba para venir y ya está en el mundo.
Y la bestia, que era y que ya no es, es el octavo, uno de los siete, que camina hacia su ruina.
La bestia que has visto era, pero ya no es; va a subir del abismo y a encaminarse hacia su ruina. Los habitantes de la tierra, cuyos nombres no están escritos en el libro de la vida desde la fundación del mundo, se llenarán de estupor cuando vean reaparecer a la bestia que era y ya no es.