Así procedía Absalón con todos los israelitas que venían a pedir justicia al rey, y así ganaba el corazón de los israelitas.
2 Samuel 18:7 - Biblia Martin Nieto El pueblo de Israel fue derrotado por los servidores de David, y aquel día fue grande la derrota: murieron veinte mil hombres. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y allí cayó el pueblo de Israel delante de los siervos de David, y se hizo allí en aquel día una gran matanza de veinte mil hombres. Biblia Nueva Traducción Viviente y los hombres de David rechazaron los ataques de las tropas israelitas. Aquel día hubo una gran matanza, y veinte mil hombres perdieron la vida. Biblia Católica (Latinoamericana) Fue una gran derrota para el ejército de Israel, la gente de David los aplastaron y perdieron veinte mil hombres. La Biblia Textual 3a Edicion Y allí fue derrotado el pueblo de Israel ante los siervos de David; y en aquel día se hizo una matanza de veinte mil hombres. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Allí fue derrotado Israel por los servidores de David, y fue grande aquel día la mortandad: veinte mil hombres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y allí cayó el pueblo de Israel delante de los siervos de David, y se hizo una gran matanza de veinte mil hombres. |
Así procedía Absalón con todos los israelitas que venían a pedir justicia al rey, y así ganaba el corazón de los israelitas.
El ejército salió al campo, al encuentro de Israel, y la batalla tuvo lugar en el monte de Efraín.
La batalla se extendió por toda la región, y aquel día el bosque causó más muertes que la espada.
Aquel día hubo una batalla muy dura, y Abner y los de Israel fueron vencidos por los partidarios de David.
Abner gritó a Joab: '¿Devorará siempre la espada? ¿No sabes que el fin puede ser amargo? ¿A qué esperas para decir al pueblo que deje de perseguir a sus hermanos?'.
Los de David habían matado trescientos sesenta hombres de Benjamín y de Abner.
Pécaj, hijo de Romelía, mató en un solo día ciento veinte mil hombres de Judá, guerreros valerosos; todo porque habían abandonado al Señor, el Dios de sus padres.
Tú das a los reyes la victoria, tú salvas a tu siervo David de la espada mortal.
Ciertamente no quedarán impunes los injustos, mas la posteridad de los justos se salvará.