Tu sierva se dijo: La palabra del rey, mi señor, servirá para tranquilizarnos; pues mi señor, el rey, es como un ángel de Dios para comprender el bien y el mal. Que el Señor, tu Dios, esté contigo'.
2 Samuel 14:18 - Biblia Martin Nieto Entonces el rey dijo a la mujer: 'Te pido que no me ocultes nada de cuanto voy a preguntarte'. La mujer respondió: 'Hable mi señor, el rey'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Entonces David respondió y dijo a la mujer: Yo te ruego que no me encubras nada de lo que yo te preguntare. Y la mujer dijo: Hable mi señor el rey. Biblia Nueva Traducción Viviente —Tengo que saber algo —le dijo el rey—, y dime la verdad. —¿Sí, mi señor el rey? —respondió ella. Biblia Católica (Latinoamericana) El rey respondió a la mujer: 'No me ocultes nada y respóndeme esta pregunta'. La mujer le dijo: 'Hable mi señor rey'. La Biblia Textual 3a Edicion Y el rey respondió y dijo a la mujer: No me ocultes ahora nada de lo que te voy a preguntar. Y la mujer dijo: Ruego a mi señor el rey que hable. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondió entonces el rey a la mujer: 'No me ocultes nada de lo que te voy a preguntar'. La mujer le contestó: '¡Dígnese hablar el rey, mi señor!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces él respondió, y dijo a la mujer: Yo te ruego que no me encubras nada de lo que yo te preguntare. Y la mujer dijo: Hable mi señor el rey. |
Tu sierva se dijo: La palabra del rey, mi señor, servirá para tranquilizarnos; pues mi señor, el rey, es como un ángel de Dios para comprender el bien y el mal. Que el Señor, tu Dios, esté contigo'.
El rey le preguntó: '¿No está contigo la mano de Joab en todo este asunto?'. La mujer respondió: 'Por tu vida, que no se desvía a la derecha o a la izquierda nada de cuanto dice mi señor, el rey: Tu mismo siervo Joab es quien me ha mandado y me ha indicado todo lo que tenía que decirte.
El rey Sedecías mandó a buscar al profeta Jeremías a la tercera puerta del templo del Señor; el rey dijo a Jeremías: 'Tengo que preguntarte una cosa, no me ocultes nada'.
Si los dignatarios llegan a saber que yo he hablado contigo y se presentan a ti para decirte: Queremos saber qué has dicho al rey y qué es lo que el rey te ha respondido; no nos ocultes nada, de lo contrario te mataremos,